Abogados Cristianos denuncia a las artistas que posaron semidesnudas ante la catedral de Cuenca

La performance obscena que el pasado lunes llevó a cabo frente a la Catedral de Cuenca y la parroquia conquense de la Virgen de la Luz el grupo artístico-feminista Yeguada Latinoamericana sigue generando polémica. Pero ahora no solo en la ciudad, sino que ha adquirido relevancia nacional. 

Después de que el obispo de Cuenca, José María Yanguas, haya pedido a los religiosos y a los fieles de la Diócesis que recen el rosario como acto de desagravio y "que pidan al Señor por la conversión de los autores de los lamentables sucesos", la Fundación Española de Abogados Cristianos ha anunciado que ha interpuesto una querella contra las seis mujeres que llevaron a cabo el show.

"Una de las manifestantes imitaba en apariencia a la Virgen María usando elementos religiosos mientras otras cinco personas posaban a cuatro patas semidesnudas con indumentaria religiosa y una coleta entre las nalgas", ha explicado en una nota de prensa Abogados Cristianos, que también ha recordado que las seis mujeres fueron identificadas por agentes de la Policía Nacional.

Tres posibles delitos

La presidenta de Abogados Cristianos, Polonia Castellanos, ha señalado que "este acto, completamente vergonzoso y fuera de lugar, es un insulto mayúsculo hacia las creencias religiosas", por lo que la fundación ha decidido querellarse contra las activistas, a las que atribuyen la comisión de tres posibles delitos: incitación al odio, contra los sentimientos religiosos y manifestación ilícita.

"Estas señoras, que posan desnudas frente a nuestras iglesias, lo único que quieren es publicidad barata a costa de ofender a los cristianos", ha añadido Castellanos, que ha advertido que "estas acciones suponen ataques gratuitos a nuestras creencias religiosas y llegaremos hasta donde haga falta para que estos actos no queden impunes".

Yeguada Latinoamericana es proyecto de performance dirigido por la chilena Cheril Linett, que convoca "a mujeres y disidencias sexuales a participar de acciones en espacios públicos, utilizando la cola de yegua como prótesis contrasexual" para "subvertir, criticar y desafiar los regímenes clasistas, patriarcales, coloniales y especistas".