La Consejería de Desarrollo Sostenible ha recogido cuatro alegaciones al plan que regula las actividades de uso público en el Monumento Natural Las Chorreras del Cabriel en los municipios de Enguídanos y Víllora (Cuenca), un espacio natural donde este verano se han producido alrededor de una quincena de accidentes que han precisado de la intervención de los bomberos de la Diputación de Cuenca, en la mayoría de los casos. Estas alegaciones piden desde la reducción de visitantes, a la prohibición total del baño.
Así lo ha confirmado a Europa Press Antonio Aranda, jefe de servicio de Espacios Naturales de la Consejería de Desarrollo Sostenible, quien detallaba que se han recogido cuatro alegaciones presentadas por la Dirección General de Salud Pública, la Federación castellanomanchega de piragüismo, la asociación de vecinos 'Salto de Víllora' y una asociación conservacionista.
Después de estos pasos, la Consejería de Desarrollo Sostenible se reunirá con "administraciones interesadas" en regular este espacio, entre las que Aranda ha citado a ayuntamientos o a la Confederación Hidrográfica del Júcar, para abordar las alegaciones e intentar formalizar un documento definitivo.
[ Las chorreras del Cabriel: el oasis que los imprudentes convierten en infierno ]
Una vez que concluyan estos encuentros, la Consejería de Desarrollo Sostenible pretende que a principios del mes de diciembre se pueda tener listo de un borrador del nuevo plan, y de este modo, "con antelación suficiente", alumbrar una nueva normativa a aplicar en el verano de 2023.
Nuevo marco normativo
La proliferación de accidentes y la masificación de un lugar declarado como monumento natural obligó a la Consejería de Desarrollo Sostenible a revisar el plan que regula las actividades de uso público en el Monumento Natural un año y medio antes de lo que requería la normativa.
Como ya les adelantaba EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM a mediados del mes de agosto, el primer borrador de la norma establecía como gran novedad la limitación a 250 personas diarias al interior de Las Chorreras del Cabriel. Para ello, la Consejería de Desarrollo Sostenible debería un portal digital a través del cual se podrán hacer las reservas. De igual modo, también prohibía "el empleo de sombrillas, toldos, hamacas, sillas, mesas o cualquier otro utensilio que necesite ser anclado al suelo, estar sujeto a la vegetación o que pueda favorecer la erosión de las rocas".
Una vez dado el siguiente paso, el de la presentación de las alegaciones y con las reuniones con los diferentes colectivos todavía pendientes, Aranda ha señalado que "quizá" la fórmula pase "por menos visitantes y más calidad", al tiempo que ha mencionado que los ciudadanos piensan en las Chorreras como unas "piscinas al aire libre gratuitas" y "se llevan de todo", por lo que el beneficio económico en la zona no es muy notable.
Para que la visita a este espacio natural redundara más en el beneficio económico, una opción sería desestacionalizar las Chorreras, y que no fuera foco de público masivo solo en verano. Por ejemplo, por medio de rutas por Enguídanos, que tienen un gran atractivo.
Respecto a los accidentes, Aranda reconoce que es el año que mayor número de incidentes se han contabilizado y relata que se trata, en muchos casos, de gente "inexperta" que ha visitado la zona o que no iba con el equipamiento adecuado, ya que este Monumento Natural presenta grandes niveles y partes resbaladizas.
Por este motivo, la Consejería de Desarrollo Sostenible tuvo que contratar a dos informadores este verano, uno en cada una de las entradas, que trasladaban a los visitantes recomendaciones y advertencias para evitar este tipo de accidentes. "Estamos muy preocupados", ha concluido Aranda.