Con el año nuevo, este miércoles ha entrado en vigor la modificación de ordenanzas fiscales en la ciudad de Guadalajara, que lleva aparejada una congelación de impuestos, tasas y precios públicos, además de un incremento "importante" de las bonificaciones. Además, estas bonificaciones serán aplicadas teniendo en cuenta los valores catastrales de las viviendas.

Según ha informado el Consistorio guadalajareño en nota de prensa, en 2020 se mantiene el tipo municipal del IBI en el 0,48 aunque el Ministerio de Hacienda ha aprobado la revisión de valores catastrales impulsada por el nuevo equipo de Gobierno con el objetivo de mitigar los efectos sobre el recibo del incremento automático fijado en 2013, con una aplicación prorrateada a diez años. De esta manera, el Gobierno municipal espera que el importe que pagan los vecinos se mantenga.

El concejal de Hacienda, Santiago Baeza, ha reconocido que el nuevo Gobierno municipal "quiso revisar a la baja el tipo municipal del IBI aunque, visto el gasto desmesurado e incontrolado del anterior mandato, la opción más responsable ha sido la de mantenerlo en el 0.48 solicitando una revisión de valores" para evitar que los vecinos de Guadalajara "sigan haciendo frente al catastrazo de Rajoy de 2013" con el que, ha asegurado, "hipotecaron" al Ayuntamiento durante 10 años "sin que el entonces Gobierno de Román abriese la boca y sin que en ningún otro ejercicio solicitasen esta revisión en la que hemos pedido que se aplique el máximo de rebaja porque es justo y razonable".

Por otra parte, con 2020 entra en vigor una nueva tasa por la que las eléctricas tributan por las redes de transporte de energía que utilizan el subsuelo, el suelo o el vuelo en el término municipal. Se trata de una tasa similar a la que actualmente pagan las empresas de telecomunicaciones por cablear la ciudad, que se calculará en función de la longitud, el diámetro, la potencia y el espacio a ocupar.

Además, en 2019 las familias que tenían deudas generadas por el impago de impuestos no pudieron acceder a las líneas de subvenciones y bonificaciones planteadas por el Ayuntamiento y por otras administraciones. Con la nueva propuesta, en este año se elevará en hasta 24 meses el plazo para hacer frente a los impagos de forma fraccionada, suprimiendo el mínimo de 30 euros en las fracciones resultantes, previo informe de los servicios sociales.

De otro lado, las nuevas ordenanzas fiscales que acaban de entrar en vigor incorporan una modificación relacionada con la reparación y recuperación de las víctimas de la dictadura, con la que se suprimen las tasas por exhumaciones e inhumaciones contempladas en La Ley de la Memoria Histórica.

Una novedad es la regulación de las bonificaciones de IBI para familias numerosas en función del valor catastral de la vivienda. En función de dicho valor y del número de hijos, las bonificaciones oscilan entre el 25 y el 85 por ciento.

En el impuesto de vehículos se mantienen los tipos actuales y se elevan las bonificaciones hasta el tope definido por la Ley, el 75 por ciento, en los casos de vehículos eléctricos y de combustibles respetuosos con el medio ambiente.

Las bonificaciones en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) se regulan en función de tres objetivos prioritarios como son la revitalización del casco histórico, la mejora de los centros educativos y la generación de actividad económica y empleo. En cada uno de los supuestos anteriores, las bonificaciones oscilan entre 25 y el 95 por ciento según distintos criterios y en función de la aplicación de distintos coeficientes. Con la enmienda aceptada de Podemos a estas ordenanzas, los propietarios de solares en el caso histórico con más dos años de antigüedad solo podrán acceder al 50 por ciento de su bonificación.

En cuanto a la Ordenanza de Terrazas, se bonifica hasta un 50 por ciento de la tasa de instalación en pequeños establecimientos, con volúmenes de facturación de hasta 100.000 euros. La bonificación será del 25 por ciento en los casos de establecimientos que facturen hasta 150.000 euros.

Por último, se mantiene en el 5 por ciento la gratificación por el pago fraccionado de impuestos, lo que se conoce como Sistema Especial de Pagos, fijando el máximo a bonificar en los 100 euros por contribuyente.

Santiago Baeza, actual responsable de Hacienda, ha recordado que la intención del nuevo equipo de Gobierno es la de "avanzar en la progresividad fiscal, buscar nuevos ingresos que no dependan del bolsillo del vecino y reducir la presión en tributos como el IBI". Para ello, ha añadido, "la prioridad es que el Ayuntamiento regrese a la normalidad presupuestaria después de un año con un presupuesto prorrogado y un gasto desmesurado que no ha permitido por ahora modificar algunos impuestos y tasas".