La Diócesis de Cuenca también ha retirado el agua bendita de todas las pilas de los lugares de culto de la provincia, donde algunas parroquias confiesan sólo por la zona de la rejilla, tapada con tela para poder ser lavada.
Esta son algunas de las medidas que ya se adoptan en toda la provincia para prevenir en coronavirus y siguiendo las recomendaciones de la Confederación Episcopal Española, según han informado fuentes del Obispado de Cuenca.
En concreto, han precisado que además de las recomendaciones generales, algunas parroquias sólo confiesan por la zona de la rejilla, tapada con tela para poder ser lavada.
Además, en la celebración de la eucaristía se lleva a cabo otro gesto de paz distinto al habitual de abrazar o estrechar la mano a los que están próximos.
Insisten en el Obispado que las personas que distribuyen la comunión, se laven las manos antes y después de este momento, igual que se hacía antes.
Invitan además a que las muestras de devoción y afecto hacia las imágenes sean sustituidas por otras como la inclinación o la reverencia, evitando el contacto físico con ellas y facilitando una mayor rapidez que evite aglomeraciones.
La Consejería de Sanidad no ha confirmado, hasta este lunes 9 de marzo, ningún caso positivo por coronavirus en la provincia de Cuenca.
Vuelven las misas al Hospital de Guadalajara
Mientras, el Hospital General de Guadalajara cuenta de nuevo con sus misas que tradicionalmente se imparten en la capilla de este centro médico, pero con las recomendaciones realizadas por la Conferencia Episcopal.
Entre ellas, tal y como se puede leer en los carteles instalados en la capilla de este centro hospitalario, se informa de que los fieles deben abstenerse de darse la mano en el momento de la paz, que deben abstenerse de besar o tocar las imágenes y que deben higienizarse las manos antes y después de la celebración.
Cabe recordar que, atendiendo a las recomendaciones del Ministerio de Sanidad, la Cofradía de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Guadalajara suspendió el pasado viernes el besamanos y besapies del Cristo, ubicado en la iglesia de San Nicolás.