La asociación vecinal 'Defiende Horche' ha solicitado, para el sábado 26 de junio, autorización para celebrar una manifestación con la que los vecinos de la localidad, cansados y preocupados por el efecto llamada que está teniendo en el municipio la creciente ocupación de viviendas, quieren hacer llegar a las administraciones y a los bancos propietarios de estos pisos que deben poner fin a este creciente problema porque genera "inquietud y miedo" en este municipio de 3.000 habitantes.
Así lo ha puesto de manifiesto a Europa Press el presidente de la asociación, Fernando García, quien ha señalado que, aunque están pendientes de que se confirme la manifestación aún por parte de la Subdelegación del Gobierno, no esperan tener ningún problema.
La marcha arrancará a las 19.00 horas desde la entrada del municipio, bajará todo el Paseo de la Virgen, hasta llegar a la Plaza Mayor.
El propósito de la misma, según el presidente de esta asociación, pretende sacar a la luz el "tremendo malestar" que hay en el municipio y mostrar la "queja vecinal" ante la "inseguridad, miedo y amenazas" que se está generando en este pueblo de menos de 3.000 habitantes desde hace unos años con motivo de la ocupación de viviendas, "agravada en los últimos meses de manera "alarmante" por un "efecto llamada" que ha disparado la ocupación, con más de medio centenar de viviendas ocupadas.
"La gente ya no aguanta más", ha afirmado García, aludiendo no solo a la ocupación del bloque de viviendas conocido como 'Las 3000', propiedad de un banco, sino que ha saltado a viviendas particulares del pueblo. "La gente tiene miedo y está muy indignada", afirma.
"Nos vemos abandonados por parte de las administraciones", ha aseverado el presidente de esta asociación, creada precisamente con el fin de tener más fuerza a la hora de reivindicar que se ponga fin a este problema.
Y aunque en este abandono no incluye al Ayuntamiento ya que no tiene competencias, sí echan de menos la falta de respuesta por parte de los gobiernos central y regional, especialmente con los bancos propietarios de las mismas para que se articulen los mecanismos que sean necesarios para que de forma legal se impidan las ocupaciones.
Según García, en el municipio se vive una situación de "inseguridad total". Ha apuntado que están "hartos" y que por eso han decidido movilizarse para pedir más medios para poner fin a la ocupación "descontrolada" de pisos por el efecto llamada, unos medios que, en todo caso, ya se han incrementado con una mayor presencia de la Guardia Civil en el municipio pero que parecen ser insuficientes.
"Somos un pueblo que no llega a las 3.000 personas, tenemos más de 50 casas ocupadas y nadie nos da un a solución. Si fuesen casas privadas, ya estarían fuera", ha concluido indignado por los problemas de inseguridad que esto está generando también en la localidad.