La Fundación Franz Weber ha mostrado su malestar por la convocatoria de un “campamento de verano taurino” a cargo de una organización vinculada con esta práctica, que pretende convocar a niños de 8 a 14 años a una serie de actividades "con el claro objetivo de adoctrinar en la tauromaquia".
En un comunicado de prensa, esta fundación ha lamentado que mientras comunidades como Galicia, Islas Baleares o Cataluña han adoptado medidas restrictivas sobre el acceso de personas menores de edad a toda clase de eventos taurinos, "en esta ocasión la Junta de Castilla-La Mancha no parece ver con malos ojos la iniciativa, a pesar de su dudoso contenido pedagógico".
El campamento está organizado por la Federación Taurina de Guadalajara y está previsto que se celebre durante la primera semana de agosto en el municipio de Arbancón.
Primer campamento de este tipo en España
“Una oportunidad de dar a conocer a los más pequeños, en un entorno natural único a los pies de la Sierra norte de Guadalajara, en la localidad de Arbancón, nuestra cultura taurina, además de crear relaciones e interactuar entre ellos”, ha señalado la Federación Taurina de Guadalajara en un comunicado, en el que ha destacado que es el primer campamento de este tipo no solo de la provincia, sino de todo el territorio nacional.
Durante el campamento, del 1 al 7 de agosto de 2022, los niños de 8 a 14 años podrán realizar actividades como rocódromo, tirolinas, piscina, talleres de divisas, gymkhanas, clases prácticas de toreo, veladas nocturnas e incluso podrán visitar una ganadería de la provincia.
En cambio, la ONG Fundación Franz Weber ha recordado que el Comité de los Derechos del Niño de Naciones Unidas recomendó a España, en 2018, el alejamiento de los menores de cualquier práctica taurina, como espectadores o como participantes y adujo los posibles efectos negativos que el maltrato animal genera en el desarrollo psicosocial.
La coordinadora de la campaña "Infancia sin Violencia", Anna Mulà, ha mostrado su preocupación por que "los grupos de presión, como la Federación Taurina de Guadalajara, empleen los campamentos de verano como espacio para fomentar el maltrato animal, blanqueando el sufrimiento y la crueldad con una serie de actividades dirigidas a chavales de tan solo ocho años".
Mulà ha reclamado además que la Junta de Castilla-La Mancha paralice la actividad de manera cautelar atendiendo al interés superior de la infancia y a criterios de protección, ya que ha considerado que "enseñar a menores que torturar a un animal puede ser considerado algo positivo solo revierte de forma nociva en su desarrollo y en su papel en la sociedad".