El alcalde de Sacedón (Guadalajara), Francisco Pérez Torrecilla, ha mostrado su indignación ante la "falta de respeto" del presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT), Antonio Yáñez, ante la polémica entre el Ayuntamiento y la Confederación por el estado en el que se encuentran los alrededores de la presa de Entrepeñas.
Según Europa Press, el alcalde se ha mostrado "sorprendido por la dejación de funciones manifiesta" de Yáñez. "Si no se ve capaz de ejercer sus funciones, debería dimitir y dejar su puesto a otra persona más competente que se preocupe por la seguridad de sus instalaciones", ha expresado tras las declaraciones del presidente en las que aseguraba que está dispuesto a "ceder gustosamente" esta instalación "si el Ayuntamiento está interesado".
Pérez Torrecilla ha explicado que entiende que "los organismos públicos, especialmente los dependientes del Ministerio de Reto Demográfico, deben trabajar por el mundo rural y no desentenderse de sus problemas". "Lejos de disculparse, se ha mofado de la repercusión de las quejas del Ayuntamiento de Sacedón y ha amenazado con ceder las instalaciones".
"Una auténtica vergüenza"
Para el alcalde, esta actitud contrasta con lo que cabría exigirle al presidente de un organismo público del calado que tiene la Confederación Hidrográfica del Tajo. "Desde Europa y a través del Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico se nos anima con acierto a sumar esfuerzos y colaborar entre todas las administraciones para ayudar al mundo rural, lo que llamamos la España Vaciada".
"El presidente de la CHT falta al respeto al Ayuntamiento de Sacedón y nos amenaza, pretendiendo que nos hagamos cargo nosotros con nuestro presupuesto de sus instalaciones, ante su manifiesta dejación de funciones".
El alcalde considera que es "una auténtica vergüenza que un representante público reconozca su incapacidad para ejercer las funciones que le corresponden y mantener en buen estado sus instalaciones, como se viene demostrando, no sólo en el entorno de la presa de Entrepeñas sino también en Buendía y en las riberas de sus ríos".
Por último, ha lamentado "la escasa energía a la hora de defender el río, que nos obliga al resto de actores a redoblar esfuerzos en la lucha contra el Trasvase, y la excesiva soberbia con la que la Confederación se dirige siempre a los municipios, a los que trata como vasallos".