Una investigación arqueológica ha aportado evidencias que confirman que el yacimiento de Los Enebrales (Guadalajara) es la ocupación más antigua del Paleolítico superior realizada por grupos de Homo sapiens en el interior de la península ibérica.
Un grupo de investigadores de la Universidad Complutense de Madrid (UCM) junto a la Universidad de Burgos y a la UNED, ha publicado en Journal of Archaeological Science: Reports los resultados del análisis de los materiales extraídos del yacimiento en los años 90 donde concluyen que la antigüedad del poblamiento humano por parte de Homo sapiens en el interior peninsular es anterior a 27.000 años, según informa este lunes la institución académica madrileña.
El investigador del Departamento de Prehistoria, Historia Antigua y Arqueología de la UCM David Álvarez Alonso ha destacado que este estudio es importante porque aporta nuevos datos sobre el poblamiento humano en una zona que tradicionalmente se ha pensado que estuvo deshabitada durante miles de años, desde la desaparición de los neandertales hasta la expansión del poblamiento por parte de los humanos anatómicamente modernos.
Entre 1994 y 1995 se llevaron a cabo excavaciones arqueológicas por parte de un equipo dirigido por Jesús F. Jordá Pardo, Juan Carlos Díez Fernández-Lomana (coautores del artículo) y Alfonso Arribas, y hace tres años, Jordá y Díez retomaron el estudio a partir de los materiales recuperados, para lo que contaron con los profesores de la UCM Marcos García Diez y David Álvarez Alonso.
En el estudio se ha realizado un análisis cronoestratigráfico detallado que, junto con las dataciones realizadas, han servido para contextualizar los restos de fauna, industria lítica y arte mobiliar obtenidos en las excavaciones de los años 90.
De este modo, se ha podido obtener una novedosa información acerca del primer poblamiento por parte de Homo sapiens en el interior peninsular, por ejemplo, los restos de fauna, que proceden del consumo humano, revelan un predominio de equinos, seguidos de ciervos.
Este trabajo, junto con otras investigaciones similares en la zona, sirve para poner en relieve la necesidad de intensificar el estudio del territorio interior y la investigación sobre el primer poblamiento humano moderno en la zona, han indicado los científicos.
Además, tiene un alto valor patrimonial ya que se identifica un yacimiento con evidencias de actividad humana que, actualmente, es único en la zona interior de la península, ha señalado Álvarez Alonso.