El Rey Felipe VI volvía este jueves de entregar en Soria el I Premio de Hispanismo Internacional Duques de Soria al profesor Johannes Kabatek cuando, a la hora de comer, decidió hacer una parada en el reconocido restaurante Área 103 de la autovía A-2, en el término municipal de Almadrones, provincia de Guadalajara.
Es un restaurante de carretera famoso por sus torreznos y sus asados, y el monarca, acompañado por un equipo de la Casa Real, quiso detenerse en este punto de su trayecto de vuelta al Palacio de la Zarzuela para disfrutar de una buena comida antes de seguir su camino, tal como ha contado el periódico Nueva Alcarria.
El Rey degustó algunos de los platos más famosos del Área 103, conversó amablemente con los propietarios de este local hostelero, la familia Rebollo, y atendió a los clientes que le reconocieron y quisieron saludarle o hacerse fotos con él. Ramón Rebollo, uno de los dueños y presidente de la Fundación Nipace de Guadalajara, agradeció a Felipe VI su visita al restaurante, que también realizó muchos años atrás su padre, Juan Carlos I.
Los famosos torreznos
Cuenta la crónica del citado periódico que el Rey Felipe ya habia oído hablar de los famosos torreznos del Área 103 y fue lo primero que pidió a los camareros para comer, un plato que el monarca acompañó de pimientos de cristal de la marca propia del restaurante, con el emblemático normbre de Acojonante.
El Rey también comió ensalada de los productos de la huerta familiar de los propietarios del 103 y, por supuesto, el famoso lechazo asado de la casa, con fruta de postre.
Situado en el kilómetro 103 de la autovía A-2 en dirección a Zaragoza, el Área 103 es uno de los restaurantes de carretera más populares de España, tradicional por su asados y los imprescindibles torreznos, tal vez su plato más reconocido. Está en la Guía Repsol y siempre es muy recomendado por los camioneros.
Desde 1889
El Área 103 recibe más de 2.000 visitas diarias y ofrece cada día unos 1.500 desayunos, lo que acredita su alto nivel de aceptación entre los viajeros. Los pimientos de cristal, las alubias pochas y el riquísimo dulce de los almadrones de chocolate y crema son algunos de sus productos estrella. El Área 103 es un complejo hostelero compuesto de hotel, cafetería, restaurante, gasolinera y otros servicios a los usuarios de la A-2.
La historia de la familia Rebollo y del Área 103 empieza “allá por el año 1889, fecha en la que se hizo cargo de la Venta de Almadrones la bisabuela Celestina. Continuaron con el negocio familiar la abuela Cayetana y el abuelo Mariano, a los que les sucedieron la Nieves y el Antonio, que es como se conoce cariñosamente a mis padres dentro del mundillo del camión", explica la familia propietaria en su web oficial.
La huerta familiar es uno de los secretos del éxito de este restaurante que ofrece productos de calidad que llegan directamente a la mesa de los comensales. El Grupo Rebollo es empresa familiar de larga tradición con diversas áreas de negocio en explotación. Hostelería, turismo, alimentación, transporte, combustibles, son algunos de esta líneas de negocio.