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Desbordamiento del río Mesa. Imagen de archivo publicada por Vecinos de Villel de Mesa.
El temor a otra dana se extiende en pueblos de Guadalajara y los vecinos recogen firmas: "Aquí no ha venido nadie"
Las últimas lluvias ponen en alerta a los vecinos y exigen la limpieza inmediata del cauce del río Mesa por lo que pueda pasar.
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El temor a una nueva dana se está extendiendo en varios pueblos de la comarca de Molina de Aragón, en la provincia de Guadalajara, como Villel de Mesa, Mochales y Algar de Mesa, y los vecinos han puesto en marcha una recogida de firmas con el objetivo de llamar la atención de las Administraciones públicas y que se tomen las medidas necesarias para evitar situaciones como las que ya se han vivido.
Los habitantes de estos pueblos exigen como medida inmediata a la Confederación Hidrográfica del Ebro que proceda a la mayor brevedad posible a la limpieza del cauce del río Mesa, una petición que llevan a cabo tres meses después de que, según informa Europa Press, la última dana causara daños importantes en estas zonas.
El pasado 28 de enero volvieron a vivir un "sobresalto importante" por la intensidad de las últimas lluvias pero la Confederación Hidrográfica del Ebro, según denuncian los vecinos, "aún no ha hecho sus deberes" y deja expuestos a los habitantes de estos pueblos.
En susto permanente
Algunos vecinos de Villes de Mesa, como Eduardo García, viven casi en permanente susto, ya que su casa está cerca del río y teme que un nuevo temporal desborde otra vez el cauce, como ocurrió con la dana, y vuelva a provocar estragos. Este vecino señala a la Confederación, pero también a la Junta de Comunidades.
"El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, dijo que haría fuerza, que presionaría ante la Confederación, pero, por mucho que quiera hacer, no es competencia suya y aquí no ha venido nadie", se lamenta este vecino, en declaraciones a Europa Press, preocupado por la situación de un cauce cuya limpieza consideran muchos algo "primordial".
Con esta recogida de firmas quieren hacer presión y también hacerse oír, pues creen que "no están pidiendo una cosa del otro mundo", unas firmas que harán llegar a la administración competente para que atiendan también las demandas de los pequeños pueblos. Ya son tres meses de la dana que dejó importantes secuelas en el interior y en el campo de municipios como Villel de Mesa y, según García, los problemas siguen sin solventarse.
Cauces descontrolados
"Los cauces están descontrolados a lo largo de la cuenca, las paredes rotas y el agua no va por donde tiene que ir", afirma. Él, como otros vecinos de la zona, se sienten desamparados y ven en los compromisos de la Diputación y de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha "promesas políticas que no van a ningún sitio", subraya García.
Su temor más acuciante ahora es que se vuelva a producir un nuevo desbordamiento, ya que se trata de una comarca donde llueve y nieva habitualmente, y sin haber arreglado aún lo que dana dejó a su paso temen tener que enfrentarse a nuevos daños.
"No queremos que pase otra vez lo mismo. ¡Otra vez, no!", afirma este vecino, para quien no se trata en ningún caso de un reproche político sino de una exigencia a la Administración, reconociendo que la situación también preocupa al alcalde, Pedro Lozano, a quien respeta, pero echa de menos "más acción" para resolver este problema.
Hay que actuar
Por su parte, el regidor de Villel de Mesa asegura que él está haciendo todo lo que puede y que ha hecho hincapié también para que se acometa la limpieza del cauce del río cuanto antes "porque en un año se ha salido tres veces", disculpando tanto a la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha como a la Diputación por considerar que están haciendo lo que pueden dentro de sus competencias pero que la limpieza del cauce es responsabilidad de la Confederación del Ebro.
Según Lozano, las últimas lluvias no han afectados a viviendas ni al casco, pero sí a las parcelas. "Uno de los más perjudicados en el regadío he sido yo", ha dicho, recordando que él mismo envió un escrito dos días después de la dana a la Confederación y que les dijeron que traerían las máquinas, pero lo cierto es que aún no ha ido nadie.
En todo caso, el alcalde de Villel de Mesa comprende el nerviosismo de algunos vecinos y también la recogida de firmas y asegura que todos quieren que esto no se repita. Comparte también que para ello haya que "tomar cartas en el asunto" y reconoce que la obra "urge", asegurando que está trabajando en esa línea para que la Confederación limpie los cauces y malezas y refuerce los viales.