El alcalde de Quintanar de la Orden, Carlos Madero, ante el “acoso” y las denuncias “espolvoreadas” y “promovidas” por el número uno del Partido Socialista en Quintanar de la Orden, Juan Carlos Navalón, en contra del Ayuntamiento y sus vecinos, ha señalado que “el Ayuntamiento no está sancionado con 40.000 euros por parte de la Inspección de Trabajo en el asunto del CAI, tal y como ha difundido el señor Navalón. Navalón una vez más miente”.
El alcalde ha informado que en dicho documento la Inspección de Trabajo “abre simplemente una instrucción”. Leída en rueda de prensa la instrucción del inspector que la ha llevado a cabo, el alcalde aclaró que “esta propuesta de sanción, desproporcionada y chocante entre inclusos juristas expertos en asuntos laborales, no se basa en ningún articulado legal, sino en una literatura donde salen citas mías filtradas de un Pleno, algo muy sospechoso que alguien, y no hay que pensar mucho, habrá dictado a dicho inspector, y el Ayuntamiento tomará las medidas oportunas”. También es “sospechoso”, indicó el alcalde, que “en el último año este Ayuntamiento haya tenido seis inspecciones, y en los últimos 24 años solo dos… puede, y solo puede, que alguien desde su despacho en Toledo sea el causante de esta estadística”.
Respecto a “la falta de lealtad de Navalón con el Ayuntamiento”, Madero puso solo un ejemplo. “Yo siendo alcalde recibí en enero la comunicación de una multa de la Confederación Hidrográfica del Guadiana al Ayuntamiento, fechada en junio de 2016, cuando Navalón era alcalde, por un importe de 700.000 euros y nadie dio al “enter” para hacer política en contra de una persona, como se está haciendo en este caso conmigo”.
Madero explicó que “hasta los etarras en la justicia española tienen el derecho a defenderse y este Ayuntamiento recurrirá la sanción propuesta, aunque es una pena que tengamos que acontecer a este espectáculo porque el señor Navalón quiera ganar un puñado de votos”. Madero a este respecto indicó que “los vecinos son sabios y juzgarán la elegancia, la caballerosidad y la honestidad” de los candidatos el próximo 26 de mayo, manifestando tener él “la conciencia muy tranquila”.
“El propio Navalón llevó a las trabajadoras en su coche a denunciar al Ayuntamiento”
En este sentido, el alcalde tachó de “burdo arbitraje político” las estrategias preelectorales del PSOE de Quintanar de la Orden. Citó algunos detalles de la secuencia de la denuncia de estas trabajadoras del CAI al Ayuntamiento tales como que “fue el propio Navalón quien las llevó en su coche al juicio a denunciar al Ayuntamiento; una denuncia que vela por los intereses particulares de unas trabajadoras en contra de las arcas municipales”.
El alcalde hizo referencia a otras dos denuncias presentadas en contra del Ayuntamiento y promovidas nuevamente por Navalón. Una de ellas se refiere al cobro de una factura por importe de 5.320 euros que se generó cuando él fue alcalde y que no la pagó. En este caso, la empresa “Instalaciones Deportivas y Urbanas el Reino S.L.” ha denunciado al Ayuntamiento para cobrarla, llevando como testigo al propio Navalón y anterior alcalde, Javier Úbeda, y el juzgado la ha desestimado. El alcalde procedió a leer textualmente lo que el propio juez, ante lo chocante de la situación, redactó en su fallo: “siendo incomprensible entonces que el mismo alcalde que supuestamente ha declarado que dio el visto bueno a la factura y a los trabajos realizados (…), no ordenara el abono, ni que la empresa que ahora denuncia (…) no registrara la factura”.
Tercera denuncia promovida por Navalón en contra de su Ayuntamiento y perdida
Por último, y “como otro de los ejemplos de Navalón de ir en contra del Ayuntamiento y por ende de los intereses de los vecinos a los que pretende gobernar”, el alcalde mencionó otra denuncia promovida por el portavoz del PSOE de Quintanar, también perdida. En este caso es el despido de la periodista del Ayuntamiento. Madero explicó que el Consejo Consultivo dio la razón al ayuntamiento tras conocer los hechos. El alcalde explicó que “el 4 de diciembre de 2017 se produjo la moción de censura y el contrato de la periodista, que se renovaba de forma anual en enero, se anticipa el vencimiento para hacerle otro contrato con unas cláusulas de indemnización en caso de despido, inusitadas”. El alcalde aclaró que “no es nada personal, pero esto se conoce como fraude de ley, y la justicia, como no podía ser de otra manera, ha dado la razón al Ayuntamiento, aunque Navalón hubiera querido beneficiar a una persona en detrimento de todos los vecinos”.