La Guardia Civil mantiene en secreto tanto las ubicaciones de las plantaciones privadas de amapola blanca como aquellos lugares donde suele crecer un mayor número de plantaciones silvestres en la provincia de Toledo, para evitar la extracción ilegal de opio.
Según ha explicado a Europa Press el teniente Alberto Navarro Zaragoza, perteneciente a la Comandancia de la Guardia Civil de Toledo, el aprovechamiento de la planta 'papaver somniferum' (comúnmente conocida como la amapola blanca) con fines ilícitos, "es un problema tanto para la Guardia Civil como para las empresas farmacéuticas autorizadas para su tratamiento".
Centrándose en lo que es el ámbito de la lucha contra la delincuencia que suele acudir en las épocas en las que la amapola blanca ya es apta para recolectar de ellas el látex de opio, por parte de la Guardia Civil se llevan a cabo una serie de medidas, según ha desgranado el teniente de la Guardia Civil.
La principal de ellas es la vigilancia pero, no obstante, como el terreno es muy grande y muchas veces es complicado poder tener un control adecuado de todas las zonas, lo que se ha optado es por mantener "una estrecha colaboración" con los guardas de las fincas que las empresas farmacéuticas contratan para evitar que puedan entrar en ellas y ocasionar daños.
Mayor vigilancia
Por ello, ha apuntado, lo que se hace es que estos guardas, que son los que pueden tener una mayor vigilancia de las plantaciones privadas, incrementen todo lo posible la vigilancia de las zonas que pueden resultar a priori más accesibles a las propiedades privadas y, en caso de que observen alguna irregularidad, llamen de inmediato a la Guardia Civil para así poder investigar "lo más rápido posible" las causas que han ocasionado los desperfectos o las irregularidades que hayan surgido.
Por otra parte, para evitar el aprovechamiento ilegal de la amapola silvestre, es decir, la que crece en el campo sin ningún tipo de control, lo que se hace es incrementar las vigilancias en los lugares donde la Guardia Civil tiene conocimiento de que suelen crecer mayor número de plantas, además de realizar las identificaciones correspondientes de las personas que se encuentren en estos lugares, para llevar así un control más exhaustivo y evitar la posible realización de actos delictivos o infracciones administrativas.
No obstante, ha destacado el teniente, aunque se esté hablando del principal aspecto negativo que puede traer esta planta, "que es su posible uso para la extracción de sustancias estupefacientes", hay que quedarse con que "el correcto" aprovechamiento de la amapola blanca es "fundamental" para la creación de diversos tipos de medicinas para el tratamiento de enfermedades muy comunes como, por ejemplo, se puede utilizar para muchos tipos de medicamentos enfocados al tratamiento del dolor como la morfina o opiáceos.
Por tanto, "es muy importante que nos quedemos con que hay que evitar a toda costa la utilización de esta planta con fines ilícitos, ya que se le estaría dando una imagen que no le corresponde", ha concluido el teniente de la Guardia Civil.