Un operativo conjunto de Mossos d'Esquadra y Policía Nacional ha permitido detener en Alcalá de Henares (Madrid) a un joven de 22 años, que ya ha ingresado en prisión, como presunto autor de los delitos de acoso sexual a menores y pornografía infantil.
La investigación se inició en junio de 2018, después de que un joven de 13 años denunciara en la comisaría de Terrassa (Barcelona) que era víctima de ciberacoso sexual, según han informado este martes ambos cuerpos policiales.
El menor relató que un año atrás había contactado con él un usuario de un juego en internet de una plataforma de videojuegos y que, después de ganarse su confianza, logró que éste le facilitara las claves de acceso de sus cuentas en las redes sociales.
El nivel de control del menor fue en aumento, hasta el punto que le exigió que se instalara un programa de control remoto en el ordenador.
Un día, con la excusa de los malos resultados que el menor obtuvo en una de las partidas del videojuego, el arrestado le exigió la primera imagen con un alto contenido sexual.
Bajo la amenaza de difundir la foto en las redes, el joven le obligó a generar más vídeos con contenido sexual explícito, una situación que llevó a que tuviera un control absoluto de la víctima, obligándole a estar conectado la mayor parte del tiempo y limitando las personas con las que podía contactar.
Cuando la situación se hizo insostenible el menor lo explicó todo a sus padres, que decidieron denunciarlo en la Policía.
El joven detalló ante los Mossos d'Esquadra que conocía a otro usuario, un menor residente en Talavera de la Reina (Toledo), que también podía ser víctima del mismo acosador, por lo que este cuerpo contactó con la Policía Nacional para informar de los hechos.
Los agentes consiguieron localizar a este otro menor y constataron que, aunque había tenido contacto virtual con el acosador, aún no le había facilitado imágenes de contenido sexual.
La investigación de los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional permitió determinar que el acosador era un vecino de la localidad madrileña de Alcalá de Henares, de 22 años.
Los agentes decomisaron en el interior de su vivienda seis discos duros, tres teléfonos móviles y una tarjeta de memoria en los que había una gran cantidad de ficheros con contenidos sexuales infantiles, entre ellos el del menor denunciante.
La investigación continúa abierta para determinar si otros menores han sido víctimas del acosador y si otros adultos han colaborado o compartido estos contenidos.
El detenido pasó el pasado 8 de agosto a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Alcalá de Henares, que decretó su ingreso en prisión.