El portavoz de Medio Ambiente de la Asociación de Vecinos 'El Tajo' de Toledo, Víctor Villén, ha confiado en que la actuación del Gobierno de Castilla-La Mancha en el barrio del Polígono para eliminar el amianto existente "no pare" y "tenga continuidad en el tiempo", aunque ha criticado que la Junta no haya abordado este asunto como un "problema sanitario" y "menos ahora con la inminente apertura" del nuevo hospital.

Así se ha expresado Villén en declaraciones a Europa Press, tras la reunión que ha mantenido este lunes el colectivo y la plataforma 'Mi barrio sin amianto' con el viceconsejero de Medio Ambiente, Fernando Marchán, a la que también han acudido representantes de Tragsa y de Valoriza, y en la que el Ejecutivo autonómico ha dado información a los vecinos sobre los trabajos realizados y los que van a acometer en las parcelas afectadas por amianto en el Barrio Avanzado.

Villén ha valorado el compromiso del Gobierno regional de informar de las actuaciones, pero ha incidido en que este no es un problema de barrio sino "de ciudad" y en que, "si entre 2004 y 2014 se hubiera hecho caso y tomado en serio, las cosas estarían mucho más avanzadas".

El representante de 'El Tajo' ha recordado que en el barrio sigue habiendo "entre 70.000 y 80.000 toneladas" de amianto al aire libre, y aunque el viceconsejero les ha ofrecido también algunas cifras de gasto, ha opinado que su "lucha" no es si el gasto asciende a una cifra u otra sino "la eliminación total de una espada de Damocles del amianto en un barrio con 22.000 habitantes", instando a "que se tomen todas las medias posibles para intentar evitar esa situación".

Eliminación completa

Según ha explicado, el viceconsejero les ha informado de los trabajos para eliminar completamente el amianto en la Laguna de Arcas, y de la actuación en los tres focos detectados en el Barrio Avanzado, donde se hará un "sellado en superficie", algo que la Asociación de Vecinos ve "absurdo" si un tiempo después se quiere utilizar esa parcela, no para construcción, pero sí para otros usos como un parque o un bosque.

Además, el representante del Ejecutivo les ha detallado que continúan esperando que la justicia dé permiso para que se actúe en la parcela de titularidad particular afectada, y les ha ofrecido detalles sobre las actuaciones en el arroyo Ramabujas, que se canalizará, y donde está prevista la construcción de un muro de contención de entre ocho y diez metros de altura.

En cuanto a la señalización de las zonas de vertido de amianto por parte del Consistorio, Víctor Villén ha apuntado que les hubiera gustado que el Ayuntamiento hubiera contado con ellos para hacerlo, asegurando que de momento no ha habido contacto ni con la Asociación ni con la plataforma por parte del Gobierno municipal sobre este asunto.