El presidente del PP, Pablo Casado, ha aprovechado su visita a Toledo, donde ha protagonizado un acto sobre empleo y pensiones, para apelar al pacto por el agua de los populares, "en el que todos los presidentes autonómicos se pusieron de acuerdo", dejando claro que hay que "respetar las demandas que tiene una tierra como Castilla-La Mancha después de un verano tan duro", donde el campo "está tan afectado con la sequía".
Acompañado por la exministra de Empleo y Seguridad Social Fátima Báñez y el presidente del PP castellano-manchego, Paco Núñez, así como presidentes provinciales, candidatos al Congreso y al Senado y distintos miembros del partido, Casado ha querido mostrar su compromiso con Castilla-La Mancha en temas como agua, campo o despoblación.
Aunque ha reconocido que en Castilla-La Mancha se han completado "muy bien" las infraestructuras a nivel ferroviario "aunque hay reivindicaciones en la provincia de Toledo en la línea convencional y para Talavera en el ramal del AVE que tiene que conectar Lisboa con Madrid como el PP se comprometió", ha querido detenerse en las infraestructuras hídricas.
Así, ha dicho que es "fundamental" que se desarrolle el pacto nacional por el agua del PP "en el que todos los presidentes autonómicos se pusieron de acuerdo" y en el que se dijo que "las cuencas cedentes tienen sus necesidades, al igual que las cuencas receptoras tienen las suyas".
Eficiencia y solidaridad
Dicho esto, ha abogado por "fomentar la eficiencia y solidaridad pero respetando las demandas que tiene una tierra como Castilla-La Mancha después de un verano tan duro y de que nuestro campo esté tan afectado con la sequía"
"Un campo que -ha proseguido- está mirando de reojo lo que se tiene que negociar en los próximos meses en la Unión Europea". "Los agricultores castellano-manchegos quieren que se vuelvan a defender los intereses de España en la Unión Europea", ha avisado Casado.
"Ahora nos anuncian malas cifras y tenemos que pelearlas porque los ganaderos tienen que tener una defensa en el entorno comunitario" y lo tienen que tener en un momento de guerra comercial "en el que el vino, el aceite de oliva, los productos cárnicos y lácteos se pueden ver afectados con casi 1.000 millones de perdidas", ha sentenciado.
Ha sido en este punto donde ha pedido al Gobierno de Pedro Sánchez que "se vaya a pelear" los intereses de España a la Casa Blanca, como ha hecho Francia, y a la Unión Europea. A continuación, Casado también ha querido mostrar su compromiso con la despoblación en la región.
Listos para gobernar
Ha sido al comienzo de su discurso donde Casado ha tenido palabras de agradecimiento hacia Paco Núñez, que, según ha afirmado, "una vez más ha demostrado que el PP en Castilla-La Mancha es un partido listo para gobernar y listo para recuperar las buenas políticas de gestión".
También ha querido recordar a María Dolores de Cospedal, una gran ministra de Defensa y presidenta de Castilla-La Mancha. "La mejor presidenta que ha tenido esta tierra sin ninguna duda y me consta que se le echa mucho de menos aquí", ha dicho Casado, palabras que han arrancado los aplausos del público asistente.