Las piscinas municipales de 21 pueblos de la comarca de Talavera de la Reina no abrirán este verano de 2020 debido a la pandemia de coronavirus y las dificultades para poder cumplir las medidas de seguridad para evitar contagios.
Según han explicado este viernes a través de un comunicado conjunto los alcaldes de estos municipios, no abrirán sus pisicinas este verano: Alberche, Alcañizo, Alcolea de Tajo, Azután, El Bercial, Calera y Chozas, Caleruela, La Calzada de Oropesa, Herreruela de Oropesa, Lagartera, Mejorada, Montesclaros, Navalcán, Navalmoralejo, Oropesa, Parrillas, El Puente del Arzobispo, El Torrico, Valdeverdeja, Velada y Las Ventas de San Julián.
Han justificado esta decisión en la dificultad de cumplir las medidas de seguridad exigidas por el Ministerio de Sanidad ante la pandemia de coronavirus, tales como el distanciamiento entre los usuarios, la limitación de aforo en el agua y las exigencias de desinfección y limpieza.
"Después de valorar pros y contras, todos los ayuntamientos hemos estado de acuerdo en que la situación actual no es la adecuada para abrir unas instalaciones que se utilizan principalmente de forma recreativa y que, aún cumpliendo con todas las recomendaciones que aparecen en el documento del Ministerio de Sanidad del 14 de mayo, podrían ser un foco claro de posibles contagios", han subrayado.
En este sentido, los alcaldes de la comarca han apostado por "seguir protegiendo en la medida de lo posible en materia de salud pública, a nuestra ciudadanía, más si cabe con el avance en las fases de desescalada, que van a ir permitiendo paulatinamente una mayor movilidad y una posible llegada de un buen número de vecinos que sabemos están deseando volver a disfrutar de su pueblo y que como siempre serán bienvenidos".
Hay que tener en cuenta, han explicado, que las piscinas son zonas públicas donde se concentran gran cantidad de usuarios, "lo que las convierte en lugares susceptibles de contagio y propagación del virus”, han añadido.
Llamamiento a los vecinos
También, los alcaldes han hecho un llamamiento "tanto a los vecinos que han pasado el confinamiento en nuestros pueblos, y que en su mayoría han cumplido las normas de manera ejemplar, como a los posibles vecinos que vayan a llegar en fechas próximas, que por el bien de todos cumplan las obligaciones y recomendaciones que se nos están haciendo llegar desde las autoridades competentes, para reducir al máximo el peligro de posibles contagios".
En los próximos meses, han advertido los alcaldes, va a ser muy importante "seguir con la guardia alta contra el COVID-19, ya que todavía hay muchas incógnitas acerca de todo lo que rodea a este virus".
Han asegurado que les “ha costado mucho tomar una decisión que resulta dolorosa y que puede llegar a ser hasta impopular", pero aseguran que "ante todo" han optado por la prudencia.