Desalojan una fiesta ilegal con un centenar de asistentes en un pueblo de Toledo
La Policía Local de la localidad toledana de Seseña ha localizado en la madrugada de este domingo, 1 de noviembre, una fiesta ilegal que se estaba celebrando en un chalet de la localidad con casi cien personas participantes, tal como ha informado el Ayuntamiento en un comunicado de prensa.
Antes de proceder al desalojo, la Policía Local denunció e identificó a todos los asistentes, muchos escondidos en los recovecos de la vivienda, comprobando que los asistentes procedían, en gran parte, de municipios del sur de Madrid y de localidades limítrofes a Seseña, saltándose en muchos casos el confinamiento perimetral de ambas comunidades autónomas, además de la restricción de movilidad popularmente llamada “toque de queda”, informa el Ayuntamiento
La intervención de la Policía local interponía un gran número de denuncias dada la diversidad de las infracciones cometidas: "quebrantamiento del estado de alarma, posesión de sustancias prohibidas, incumplimiento del uso de mascarilla obligatoria, orden de expulsión del territorio, etc.", asegura el comunicado.
Además. los organizadores de la fiesta han sido denunciados por emplear una vivienda, chalet de tres alturas, como zona festiva, en cuyo interior, además, encontraron una gran cantidad de alcohol y sustancias ilegales, así como un equipo profesional de música con DJ.
La actuación llevada a cabo por la Policía Local de Seseña contó con la colaboración de la Guardia Civil y se dio por terminada a altas horas de la madrugada tras identificar y denunciar a todos los asistentes y organizadores, a los cuales se les practico un concurso de denuncias como consecuencia de la organización de la fiesta.
Desde el Ayuntamiento de Seseña se condenan estas actuaciones en contra de la ley y la salud pública. El consistorio local lamenta este tipo de conductas, diametralmente opuestas a un autoconfinamiento inteligente, poniendo en peligro la salud de los ciudadanos y favoreciendo el contagio comunitario.
Igualmente, desde el ayuntamiento se apela a la responsabilidad de los vecinos para evitar conductas irresponsables como la acontecida, necesarias para frenar la curva de contagios y evitar un nuevo confinamiento domiciliario.