La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha acudido a la Inspección de Trabajo "ante la negativa de la Gerencia del Hospital Virgen de la Salud de Toledo de dar marcha atrás en el uso del espacio del Servicio de Rehabilitación como Servicio de Urgencias para la atención de pacientes con COVID-19".
CSIF exponía la semana pasada a la Gerencia todas las deficiencias detectadas y la necesidad de contar con la evaluación del Servicio de Prevención de Riesgos Laborales, "pero en su lugar continúa adelante la adaptación de las salas de Rehabilitación, servicio que se ha trasladado al nuevo hospital, con el consiguiente riesgo de contagio de coronavirus por la falta de medidas", según ha informado el sindicato en nota de prensa.
La responsable de Sanidad de CSIF Toledo, Marisa García, ha señalado que desde la central sindical no entiende "cómo la Gerencia es capaz de poner en riesgo a sus propios profesionales y a los pacientes", alegando que "el espacio del Servicio de Rehabilitación no puede ser utilizado como espacio para pacientes COVID-19".
Así, la Central Sindical señala que el recorrido que llevan a cabo los pacientes con coronavirus desde Urgencias hasta Rehabilitación atraviesa el pasillo de Radiología Infantil, ascensores y pasillo de planta -1, a lo que se suma que el trayecto es compartido por profesionales de diferentes categorías y con el tránsito añadido de carros de comida procedentes de la cocina y carros de ropa limpia.
A todo ello se añade que el espacio de Rehabilitación no cuenta con aireación natural, carece de un sistema seguro de renovación de aire interior con filtros homologados y colinda con la zona de descanso de los facultativos.
Esta decisión está generando un "enorme malestar" en la propia plantilla del Hospital Virgen de la Salud "con profesionales que ya han mostrado su negativa a trabajar en este nuevo espacio adaptado". Por todo ello, y ante la falta de soluciones por parte de la Gerencia, CSIF ha presentado una denuncia ante Inspección de Trabajo.