La Demarcación de Castilla-La Mancha del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, ante la publicación del estudio informativo de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Extremadura en su tramo Madrid-Oropesa y las dos alternativas que se plantean en este estudio, con una ligera diferencia entre ambas, considera que se debería contemplar, al menos, una tercera alternativa soterrada a su paso por el casco urbano de Talavera de la Reina (Toledo).
En un comunicado, el Colegio recuerda que, según el estudio informativo publicado el pasado mes de noviembre por el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, se plantean dos alternativas diferentes que pasan por Talavera de la Reina, con ligeras diferencias entre ellas.
La principal, además de la ubicación de la nueva estación, que en ambos casos estaría próxima a la actual, es que se define la segunda alternativa con el objetivo de aumentar la velocidad de paso por Talavera de la Reina de los trenes sin parada en la nueva estación: 300 kilómetros por hora frente a 170 kilómetros por hora de la alternativa 1, lo que se consigue mediante una variante exterior de trazado de las nuevas vías respecto del corredor actual a la salida de la estación en dirección a Extremadura.
Por tanto, desde el Colegio de Ingenieros de Caminos señalan que "no existe ninguna alternativa" que recoja el protocolo de actuación firmado por los titulares de las distintas administraciones --Ministerio de Fomento, Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Adif y Ayuntamiento de Talavera de la Reina-- en octubre de 2007, según el cual, la decisión adoptada para la integración del ferrocarril en Talavera consistiría en el soterramiento de las vías de alta velocidad.
Posteriormente, en julio de 2010 se publicó en el Boletín Oficial del Estado la resolución sobre la evaluación del impacto ambiental del proyecto, que contempla en Talavera de la Reina una longitud total de 5,66 kilómetros de trazado, de los cuales 3,65 kilómetros serían soterrados, 1,26 kilómetros de rampas de acceso y el resto en superficie, adjudicándose en junio de 2011 la redacción del proyecto constructivo.
Los ingenieros de caminos destacan que, en general, "se suele considerar de vital importancia el soterramiento de las vías del tren en tramos urbanos por los aspectos paisajísticos, urbanísticos y acústicos que entran en juego".
Un trazado en superficie, en el caso de Talavera de la Reina, podría suponer "establecer una barrera definitiva que impida el desarrollo urbanístico por el norte, zona de expansión natural de la ciudad, dado que por el sur está limitada por la presencia del cauce del río Tajo".
Medidas correctoras
En cualquier caso, para una mejor integración urbana del ferrocarril, y más si la solución adoptada finalmente no contempla el soterramiento, el Colegio de Ingenieros de Caminos asegura que se deben diseñar las oportunas medidas correctoras, de permeabilidad, los accesos y la transversalidad de la barrera, así como una idónea configuración de la estación.
Servicio de Cercanías y mercancías Igualmente, desde el Colegio consideran que se debería incidir, en mayor medida, en la compatibilidad en la estación con los dos anchos de vía existentes, el internacional de la alta velocidad y el ibérico de la línea convencional, para que puedan quedar integrados los distintos servicios ferroviarios, abriendo además la posibilidad del establecimiento de un servicio de Cercanías.
También al Colegio de Ingenieros de Caminos les parece oportuno un análisis en profundidad de la explotación del transporte ferroviario de mercancías con nuevas instalaciones y sus conexiones con el área industrial y con el desarrollo de la Plataforma Logística de Talavera, de forma que estas conexiones puedan materializarse antes de la llegada de la Alta Velocidad.