Después de 33 años y medio comojefe de prensa del Ayuntamiento de Toledo, Quique Sánchez Lubián se jubila este jueves con un gran sabor de boca y con la satisfacción de haber sido un testigo "muy cercano" de todos los avances y momentos importantes que ha vivido la ciudad. Sánchez Lubián es en sí mismo toda una institución en el periodismo castellano-manchego de las últimas décadas.

"Con mucha intensidad". Así describe Quique, natural de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), su paso por el Consistorio al que llegó en 1987 con un reto en mente y con muchísima ilusión. "Mi objetivo era poner en marcha una oficina de prensa que, hoy por hoy, está consolidada. Hay un departamento bastante potente y con profesionales muy cualificados", comenta.

A lo largo de estas tres décadas, el alcazareño ha visto cómo la ciudad ha ido "tomando peso y superando muchos baches". "A finales de los 80 había en el Casco una gran despoblación que se fue superando poco a poco; el Polígono ha sufrido una enormetransformación, ya que al principio solo había dos o tres empresas punteras, y la ciudad se ha ido incorporando a las grandes redes de comunicación".

Quique tenía claro desde su adolescencia, cuando escribía crónicas de los partidos del recreo en hojas de cuaderno junto a su compañero de pupitre, que quería dedicarse al mundo del periodismo.Según explica, tuvo la " gran suerte" de que a partir de 1977, a mitad de carrera, empezó a colaborar en diferentes en medios hasta que en 1979 tuvo su primer contrato en una revista de Madrid. "Fue una ilusión porque empecé muy pronto y me he dedicado a ello 42 años de mi vida profesional. Gracias a Dios, mi familia y yo hemos podido comer del periodismo".

Durante su andadura, el periodista ha pasado por el diario Lanzade Ciudad Real, trabajo que compaginó con diversas colaboraciones en revistas importantes de la época comoCuadernos para el diálogooInterviú.Tras su paso por el Servicio militar, empezó en la revistaEl Ciudadano, dedicada a temas de defensa del consumidor y, en septiembre de 1981, llegó a Toledo para incorporarse al diario Ya.

Fue en 1987 cuandoel Ayuntamiento de la capital creó una plaza de jefe de prensa y Quique, consciente de la situación económica que atravesaba el diario de los obispos, se presentó a la oposición consiguiendo la plaza, donde ha permanecido durante 33 años.

A lo largo de nueve corporaciones diferentes, el periodista ha vivido momentos de todo tipo, pero considera que el balance "es muy positivo", ya que ha tenido una relación de amistad con casi todos, tanto con alcaldes como concejales. "Tengo la fortuna de decir que una inmensa mayoría son con los que sigo manteniendo una relación buena y, en algunos casos, una excelente amistad".

A pesar de tener ideales diferentes en algunos casos, Quique afirma que "las ideas nunca nos han enturbiado". Aunque, según indica, siempre ha sido "una persona muy comprometida con la izquierda", a la hora de fichar "esas ideas se han quedado en la puerta del Ayuntamiento". "He sido siempre muy comprometido con todos los partidos".

Repasando todas las legislaturas, el alcazareño tiene claro cuáles han sido las mejores. En primer lugar, destaca la del 1987, "porque fue la primeray vine con un reto en mente y con mucha ilusión". Además, afirma que conJosé Manuel Molina sigue teniendo una "relación de amistad".La segunda mejor fue la de Joaquín Sánchez Garrido, ya que"se hicieron muchas cosas por la ciudad y todas las personas que estuvimos junto a él lo recordamos con mucho cariño". Finalmente, Quique considera que la llegada deMilagros Tolón fue "un regalo para este fin de la etapa". "He trabajado plenamente con alguien a quien aprecio y con un equipo excepcional. Estoy muy satisfecho porque he podido desarrollar unas potencialidades que en otras épocas han estado olvidadas", señala.

Sin embargo, no todo ha sido bueno durante este largo período. Según indica, con Agustín Condetuvo "malos entendidos que no se aclararon", aunque durante esos años consiguió encontrar un "salvavidas" en la investigación. "A partir de ese momento me di cuenta de lo que me gustaba escribir y publicar cosas, y a día de hoy no he parado. Tengo casi 40 libros editados, una parte importante vinculados a la historia de Toledo y otra parte a la historia de Alcázar, que es mi pueblo natal".

Hoy,QuiqueSánchez Lubiánpone fin a esta gran etapa, pero su pasión por la profesión continúa.Lo que sí se va a tomar, confiesa, es un pequeño paréntesis para "ordenar las ideas y seguir adelante". "Cuando trabajas muchos años con un ordenador, empieza a petarse la memoria y hay que resetearlo. Mi cabeza es igual y me pide parar un tiempo", concluye.