El PP defenderá este martes en el Congreso una iniciativa para instar al Gobierno a ordenar al Ayuntamiento de Palma de Mallorca que revoque su decisión de retirar del callejero de la ciudad la 'Calle Toledo' en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, así como que "condene" esa "sectaria" actuación. Aunque la placa ha sido retirada, el consistorio ha decidido poner el mismo nombre a otra calle de la ciudad.
El Ayuntamiento de Palma, donde gobierna el PSOE con el apoyo de Podemos y Més per Mallorca acordó el pasado mes de marzo la retirada de varias calles rotuladas durante el franquismo, entre ellas la dedicada a Toledo, incluida en un censo de simbología franquista, con el argumento de que pretendía ensalzar el asedio del Alcázar de Toledo durante la Guerra Civil. Lo mismo se decidió respecto a las calles que dan nombre por a los almirantes Churruca, Gravina y Cervera, marinos de los siglos XVIII y XIX.
La decisión provocó la indignación de la alcaldesa de Toledo, la socialista Milagros Tolón, quien conversó con el alcalde de Palma, José Hila, también del PSOE, que acabó anunciando que se pondría el nombre de Toledo a otra calle del municipio.
La polémica llegara al Congreso de la mano del PP, que este martes forzarán un debate y una votación en la Comisión de Política Territorial y Función Pública por considerar que la retirada de la calle es "un acto de ofensa intolerable" y de "agravio" a Toledo, sus habitantes y al "conjunto de los españoles".
En su iniciativa, recogida por Europa Press, los diputados toledanos, Carmen Riolobos y Vicente Tirado, tachan de "injustificada, errónea y sectaria" la aplicación, en este caso, de la Ley de Memoria Histórica. "Sólo desde la incultura, el sectarismo y el odio se puede tomar una decisión tan injusta y peligrosa", subrayan.
Peligrosa división
A su juicio, es "peligrosa" porque supone "un precedente" de división de los españoles. "Toledo y Palma son dos ciudades maravillosas de España. Y hay que recordar que a los españoles la unidad nos fortalece y la diversidad nos enriquece con ciudades diversas y plurales enraizadas en valores humanísticos y democráticos", argumentan.
Además, recuerdan el origen romano del nombre de Toledo, bautizada 'Toletum' por el historiador Tito Livio, que el municipio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1986, y que fue la "ciudad de la tolerancia" donde convivieron "cristianos, musulmanes y judíos", además de capital del reino visigodo (513), sede de la Iglesia de España (siglo XVI), y capital del Imperio y la Monarquía Hispánica entre 1519 y 1561.