Las asociaciones convocantes de la huelga quieren salir al paso de las informaciones "absolutamente distorsionadas de algún medio de comunicación" para indicar que las cuadrillas y los miembros del comité de huelga "han mantenido en todo momento un comportamiento absolutamente correcto, a pesar de ser increpados por elementos descontrolados y haber sido incluso objeto de un intento de agresión con arma blanca".
Las directivas de la Unión de Toreros, la Unión de Picadores y Banderilleros y la Asociación de Mozos de Espadas aclaran que la decisión de convocar huelga en Villaseca de la Sagra "obedece, como ya se ha explicado pública y reiteradamente, a proteger los legítimos derechos de los profesionales taurinos reconocidos en una norma consensuada por el sector tras largas negociaciones y concesiones".
Para los sindicatos taurinos "esa norma es el Convenio Nacional Taurino y, dado su carácter estatutario y la representatividad de las partes firmantes, es de obligado cumplimiento en el sector", y recuerdan que los acuerdos alcanzados en su seno ya incluyen un importante esfuerzo de los profesionales para favorecer la celebración de festejos en estos difíciles tiempos, que se traduce en una reducción del 25% de sus salarios mínimos".
"El ayuntamiento de Villaseca de la Sagra -continúa el comunicado- ha pretendido eludir el cumplimiento de este convenio con la artimaña de suscribir un convenio paralelo, junto con otros ayuntamientos y con la complicidad de un sindicato absolutamente minoritario como es ASPROT, con el objeto de tratar de dar cobertura legal a una rebaja salarial del 35%".
Perjudicar los derechos
Para los tres sindicatos de profesionales del toreo, el ayuntamiento de Villaseca "desconoce con ello que los convenios extraestatutarios no pueden, en modo alguno, perjudicar los derechos de los trabajadores reconocidos en un convenio de eficacia general".
En el comunicado se insiste en que los intentos de negociación emprendidos con el alcalde de la localidad "han resultado infructuosos, en tanto que su única propuesta ha sido la de traspasar la negociación a un futuro" y que el edil "incluso ha desistido de aplicar el convenio extraestatutario, consciente de su inaplicabilidad", y se ha adherido a otro similar suscrito por otra asosiacIón autodenominada "Luchadores".
Además de agradecer a los novilleros Manuel Diosleguarde y Alejandro Mora, y sus cuadrillas, su apoyo adhiriéndose a la huelga y su compromiso con la profesión, en el comunicado se recuerda que las asociaciones profesionales "han asumido, a pesar de las circunstancias, unas reducciones salariales importantes en los últimos tiempos que han permitido la organización de festejos y circuitos para recuperar la actividad taurina".
Pero también advierten que no van a admitir que, "en los festejos y circuitos especiales que se llevan a cabo gracias al apoyo y sacrificio de los profesionales comprometidos, participen quienes no respetan el Convenio Nacional Taurino", por lo que anuncian que van a promover "la incoación de los correspondientes expedientes frente a los profesionales que se hayan decantado del lado de los incumplidores".
Hubo novillada y ovación al alcalde
El novillero extremeño José Rojo, uno de los sustitutos de los toreros anunciados que secundaron la huelga de profesionales en esa plaza, salió a hombros al final del primer festejo de la feria del Alfarero de Oro de Villaseca de la Sagra (Toledo).
Se lidiaron seis novillos de Cebada Gago, bien presentados aunque desiguales de cuajo y que dieron un juego noble y manejable en su conjunto, destacando primero, quinto y tercero, mientras que al segundo se le dio inmerecidamente la vuelta al ruedo en el arrastre.
Frente a ellos, y ante un público que llenó casi la totalidad del aforo permitido, el resultado de la terna fue este:
- Emilio Silvera, silencio tras aviso y silencio.
- José Rojo, que sustituía a Alejandro Mora: oreja y oreja con petición de la segunda.
- Miguel Zazo, que sustituía a Manuel Diosleguarde: vuelta al ruedo tras petición y silencio tras dos avisos.
El festejo comenzó con una ovación dedicada al alcalde de la localidad, Jesús Hijosa, que mantuvo por la mañana un tenso encuentro con los huelguistas que le acusan de reducir ilegalmente sus honorarios, y otra para los tres novilleros, tanto el que se mantuvo en el cartel como a los dos que vinieron a cubrir los puestos dejado por sus compañeros en defensa de sus derechos.
Hubo, pues, novillada, a expensas de lo que después digan juzgados o comisiones de seguimiento, y en ella los tres espadas tuvieron una excelente oportunidad de reivindicarse que solo aprovechó Rojo ante unos "cebadas" que dieron un juego muy manejable y fácil, a pesar de los constantes desaciertos de las cuadrillas que no secundaron la protesta.
Rojo pudo pronto con la muleta a un segundo mal picado, aunque no llegaría a redondear una faena voluntariosa pero llena de altibajos al final de la cual, al entrar a matar, resultó bruscamente zarandeado por el utrero, aunque sin mayores consecuencias que los destrozos del vestido.
Ya con el quinto, que fue el mejor del sexteto por su gran clase en la embestida, el extremeño se templó con la derecha en una faena a más y a mejor que también resultó la mejor de la tarde.
Emilio Silvera, el único novillero que se mantuvo del cartel original, se pasó siempre muy despegado, a pesar de su oficio, a un primero que repitió con claridad, mientras que se vio desbordado por el cuarto, el más encastado y exigente de los seis novillos.
Por su parte, el toledano Miguel Zazo se aplicó con quietud y temple con un mansito rebrincado y berreón, del que el presidente le negó injustamente el trofeo pedido por la mayoría, y le hizo una faena igualmente templada y asentada al reacio sexto, aunque sin alcanzar eco en el tendido.