El papa Francisco se reunió este viernes en la ciudad italiana de Asís con 500 personas que pasan por dificultades económicas, con motivo de la celebración de la V Jornada Mundial de los Pobres este domingo 14 de noviembre.
"Ya es hora de que los pobres vuelvan a tener la palabra, porque durante demasiado tiempo sus demandas no han sido escuchadas. Es hora de que abran los ojos para ver el estado de desigualdad en el que viven tantas familias. Es hora de arremangarse para recuperar la dignidad creando puestos de trabajo. Es hora de volver a escandalizarse ante la realidad de los niños hambrientos, esclavizados, náufragos, víctimas inocentes de todo tipo de violencia. Es hora de que la violencia contra las mujeres se detenga y de que sean respetadas y no tratadas como mercancías. Es hora de romper el círculo de la indiferencia y descubrir de nuevo la belleza del encuentro y del diálogo", aseguró el papa en la ciudad que vio nacer a uno de sus referentes espirituales, san Francisco de Asís 'el poverello', conocido como el santo de los pobres.
Pese a la profundidad de su discurso, el argentino Jorge Bergoglio también tuvo tiempo para protagonizar una simpática anécdota mientras recorría las calles de Asís. Durante un corto trayecto a pie, el papa fue saludado por un grupo de jóvenes que se identificaron como integrantes de Cáritas Toledo. "Le queremos y estamos con usted", le dijo una joven a viva voz. Tal y como puede verse en un vídeo publicado en la red social Twitter por el periodista Salvatore Cernuzio, Francisco se detuvo unos segundos y respondió con una gran sonrisa preguntando: "¿Y las castañuelas?". Mientras, movía las manos simulando tocar el instrumento típicamente español.