El arzobispo emérito de Oviedo, Gabino Díaz Merchán (Mora, Toledo, 1926), quien fue presidente de la Conferencia Episcopal Española entre los años 1981 y 1987, ha fallecido este martes a los 96 años en la Casa Sacerdotal de la capital asturiana, donde residía desde su jubilación, en 2002, según ha informado el Arzobispado.

Díaz Merchán, que ha fallecido pasadas las 16:30 horas, había recibido el alta hospitalaria el pasado 2 de junio tras permanecer varios días ingresado en un centro sanitario por una complicación de salud leve, pero que aconsejó su traslado a un hospital para un mejor tratamiento.

Trayectoria

Díaz Merchán fue nombrado obispo de Guadix-Baza en 1965 y cuatro años después recibió una bula papal para situarse al frente de la Archidiócesis de Oviedo, el 20 de septiembre de 1969, día en el que celebró su primera Misa como Pastor ovetense en la Santa Cueva de Covadonga.

Durante los trienios 1972-75 y 1975-1978 fue presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social y ya entre 1981 y 1987, presidente de la Conferencia Episcopal Española.

Posteriormente, fue miembro de su Comité Ejecutivo hasta 1996 y también presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral de 1996 a 1999 y nuevamente miembro del Comité Ejecutivo durante el trienio 1999-2002.

Hijo Predilecto de su pueblo natal, Mora, el Ayuntamiento de Oviedo le nombró Hijo Adoptivo y le otorgó la Medalla de Oro de la ciudad en 1995.

También recibió la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha en 2000, y al año siguiente recibió el título de Hijo Adoptivo de Asturias, en el marco del Año Mariano convocado con motivo del primer centenario de la Basílica de Covadonga.

Díaz Merchán, que también es Hijo Predilecto de la Provincia de Toledo, renunció en 2002 al Arzobispado de Oviedo tras recibir el permiso de Juan Pablo II, momento en el que fue sustituido por Carlos Osoro y paso a ocupar el cargo de emérito.

Tras haber ocupado la Presidencia de la Conferencia Episcopal Española entre los años 1981 y 1987, Díaz Merchán renunció en 2002 al Arzobispado de Oviedo tras recibir el permiso de Juan Pablo II, momento en el que fue sustituido por Carlos Osoro y paso a ocupar el cargo de emérito.