D.D.M. ha sido declarado culpable de asesinar a su exmujer con un cuchillo de cocina en presencia de sus hijos el 21 de enero de 2020 en la Puebla de Almoradiel (Toledo), según el veredicto que ha emitido el jurado del proceso este viernes y que ha adelantado Europa Press.
Tras la celebración del juicio, que ha tenido lugar a puerta cerrada, los miembros del tribunal del jurado han encontrado al acusado culpable de asesinato con alevosía por unanimidad y sus integrantes han considerado por mayoría la agravante de ensañamiento y han tenido en cuenta la atenuante de confesión.
La Fiscalía pedía para él 25 años de cárcel, privación de la patria potestad de sus hijos e indemnizaciones por valor de 400.000 euros.
Varias puñaladas con un cuchillo
Los hechos ocurrieron el 21 de enero de 2020 en un domicilio de la calle Viriato, donde ambos vivían junto a sus dos hijos.
Tras una discusión y en presencia de los menores, el acusado cogió un cuchillo de cocina y le propinó una puñalada en la espalda seguida de varias en el tórax, en el antebrazo, en las manos y en la pierna izquierda, lo que le causó un total de ocho heridas.
La víctima murió a causa de un shock hipovolémico y fue el propio agresor quien avisó al 112 alrededor de las 0.25 horas para contar que había matado a su mujer. Además, también se lo contó a una vecina y le dijo que lo había hecho "porque se iba con moros y negros y se lo restregaba en la cara".
La mujer asesinada y su pareja, ambos de origen rumano, llegaron en 2006 a la localidad toledana, donde ella trabajaba como limpiadora particular fuera del municipio y él consiguió empleo en una bodega del pueblo.
Pena de 25 años de cárcel
Tras estos hechos, el Fiscal considera que procede imponer a este presunto asesino una pena de 25 años de prisión, así como la privación de la patria potestad respecto de sus hijos menores de edad y la prohibición de aproximación y comunicación tanto con los menores como con los tutores durante 35 años para evitar interferencias en el ejercicio de la guarda o tutela.
Además, Fiscalía pide que el acusado debe indemnizar a la tutora legal de los menores en la cantidad de 400.000 euros, 200.000 por cada hijo correspondientes por el fallecimiento de su madre más el interés legal.