El paleontólogo, científico, profesor de la Universidad Complutense de Madrid y codirector del yacimiento de Atapuerca, Juan Luis Arsuaga; y el especialista y restaurador en arte rupestre, Eudald Guillamet, han visitado este fin de semana las pinturas rupestres de 'La Chorrera' en la localidad de Los Yébenes (Toledo).
Esta visita se enmarca en el nuevo proyecto de conservación y puesta en valor que el ayuntamiento yebenoso está llevando a cabo en este lugar que manifestaciones artísticas de hace entre 2.000 y 2.500 años. Para ello, están contando con el apoyo del Departamento de Prehistoria de la Universidad Complutense de Madrid y la colaboración de la Viceconsejería de Cultura, la Diputación de Toledo y el Grupo de Desarrollo Rural Montes de Toledo.
El objetivo es recuperar las pinturas rupestres en los dos abrigos descubiertos hasta la fecha, localizados en un paraje natural formado por grandes farallones de cuarcitas por donde, en los meses de invierno salta el agua en forma de chorreras y cascadas.
Las pinturas rupestres de La Chorrera fueron descubiertas, en 1977, por el geólogo Carlos León, durante unos trabajos de investigación en la Sierra de Los Yébenes. Fue este investigador el que comunicó su su hallazgo a Alfonso Caballero Klink, quien realizó el estudio de las pinturas y publicó el artículo "Las pinturas rupestres esquemáticas de La Chorrera (Los Yébenes, Toledo)" con los resultados de su trabajo.
Gracias a esta labor investigadora se determinó que las pinturas de La Chorrera quedan encuadradas dentro del arte rupestre esquemático, hasta la fecha, uno de los escasos ejemplos encontrados en la provincia de Toledo