Sociedad Gitana Española ha pedido este viernes una reunión urgente con el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, para analizar el caso de Ángel, el niño de 11 años desaparecido en el barrio madrileño de Carabanchel el pasado mes de diciembre junto a su primo Fernando, cuyo cuerpo sin vida fue encontrado días después en el vertedero de Toledo. 

A través de una carta, el colectivo ha denunciado "cierta descoordinación" entre los distintos cuerpos policiales y Administraciones implicados en la búsqueda e investigación del caso y ha señalado que "la información que se facilita a las familias afectadas o a su portavoz no es fluida, resulta bastante opaca o directamente es nula, incluso teniendo la impresión que se molesta cuando se les pregunta".

Por ello, ha pedido a Grande-Marlaska mantener una reunión urgente con él para exponerle en persona los pormenores del caso e intercambiar impresiones sobre el niño, al que la Policía Nacional sigue buscando en el vertedero.

A este encuentro, según ha informado Sociedad Gitana, acudirían un representante de la entidad, un representante de la Iglesia Evangélica de Filadelfia en Madrid, un representante de cada una de las familias afectadas y los padres de los menores.

Piden que se amplíe la búsqueda

El colectivo ha pedido "que se amplíen las líneas de investigación para saber la verdad de lo que ha podido pasar con estos chicos para que Fernando apareciese en el vertedero en extrañas circunstancias y Ángel todavía no haya aparecido".

Asimismo, ha reclamado que se amplíe la búsqueda de Ángel "por montes, ríos, casas y pozos de toda la provincia, aumentando el número de efectivos, medios materiales y tecnológicos para encontrarlo cuanto antes y esclarecer la verdad de lo ocurrido".



Por último, 
ha pedido al titular del Juzgado de Toledo que lleva este caso que traslade la investigación del mismo a la Brigada Especial de Homicidios, Desaparecidos y Delitos Violentos de la Policía Nacional de Madrid.

Captados en tres lugares de Toledo 

Ángel y Fernando desaparecieron el pasado 10 de diciembre en la calle General Ricardos de Madrid cuando acudieron a un Hiper Usera mientras el padre de uno de ellos estaba en la lavandería. Desde allí se le vio entrar en la boca de metro de Oporto y salir en la de Marqués de Vadillo, donde les grabó una cámara de seguridad.

La siguiente vez que volvieron a ser captados fue ya en Toledo hasta en tres lugares diferentes: en la estación de autobuses, en un hotel y en un centro comercial.

Los investigadores creen que se escaparon de manera voluntaria para ver a una chica en la capital castellano-manchega y ante el mal tiempo que hacía aquellos días se refugiaron en un contenedor, con la mala suerte de ser sorprendidos en el momento de la recogida por el camión de la basura.

El cuerpo de Fernando, el mayor de los dos primos, apareció el 15 de diciembre en una cinta del Ecoparque de Toledo, el centro de gestión de residuos donde ser procesan los residuos de 196 pueblos de la provincia, pero no pudo ser identificado hasta varios días después por el mal estado que presentaba.

El forense determinó que no presentaba signos de violencia pero estaba irreconocible por la acción de la maquinaria que procesa los residuos.

Operativo para buscar al pequeño

Ahora, los trabajos se centran en la localización de los restos de Ángel. Para ello, la Policía Nacional ha puesto en marcha un operativo compuesto por efectivos de la Policía Judicial, guías caninos, el Grupo Operativo de Intervención Técnica (GOIT) y la Policía Científica con retroexcavadoras y maquinaria auxiliar.

La Policía está revisando un espacio concreto del vertedero, donde fue encontrado el cuerpo sin vida de Fernando, cuyas dimensiones son similares a un campo de fútbol y donde hay depositadas entre 9.000 y 10.000 toneladas de residuos.

Fuentes policiales han indicado que se calcula que ya se ha revisado algo más del 20 por ciento de la zona acotada, al tiempo que han apuntado que la investigación sigue abierta y que el caso se encuentra bajo secreto de sumario.