Toledo y Castilla-La Mancha han saldado este martes una "deuda histórica" con el escultor Alberto Sánchez, con una exposición permanente de su obra en una sala que lleva su nombre en la Colección Roberto Polo. Centro de Arte Moderno y Contemporáneo de Castilla-La Mancha Roberto Polo (CORPO).
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page; la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, y el mecenas Roberto Polo han inaugurado este nuevo espacio expositivo, con 24 obras, bajo el nombre "Alberto Sánchez. Un camino que conduce a una estrella". En el se pueden ya contemplar esculturas como 'La mujer de la estrella', 'Maternidad', 'La dama del pan de Riga' y 'Mujer castellana', así como trece dibujos entre los que están 'La mujer sentada', 'Las tres figuras' o 'Los dos pájaros'.
Según EFE, también se ha incorporado un cartel del diseñador francés Jean Carlu, donado a Castilla-La Mancha por la familia Silvia Sánchez–Vincent-Paul Lorne para la Exposición Internacional de París de 1937, además de dos libros para los que Sánchez hizo la portada.
Inauguración de la sala 'Alberto Sánchez'. Foto: JCCM.
Por su parte, la consejera de Educación, Cultura y Deportes de Castilla-La Mancha, Rosa Ana Rodríguez, ha expresado que, con este espacio, la comunidad salda "una deuda histórica" con Alberto Sánchez, que nació a pocos metros donde en la actualidad se muestra su obra, en el barrio de Covachuelas. "A pesar de que tuvo que exiliarse de España en 1938 y murió en Moscú, combinó las vanguardias con su esencia y la riqueza del castellano que siempre fue".
La consejera ha recordado que la mayor parte de las obras de la sala ya se pudieron ver en el Museo de Arte Contemporáneo, que abrió en Toledo en la década de 1970 y cerró en 2001. Además, ha destacado la perfecta conservación de las obras en los depósitos del Museo de Santa Cruz. En este punto, ha puesto en valor que las obras que forman parte de la nueva sala del CORPO no han tenido que pasar por un proceso de restauración a pesar de que el museo de arte contemporáneo cerró hace ya más de dos décadas. Además, algunas han formado parte de exposiciones temporales que se han organizado en España sobre las vanguardias del siglo XX.
Inauguración de la sala 'Alberto Sánchez'. Foto: JCCM.
Por último, ha adelantado que a finales de marzo se va a inaugurar una exposición temporal en el Museo de Santa Cruz con 90 obras del museo de arte contemporáneo, entre las que habrá creaciones de Rafael Canogar, Alberto Sánchez, dos litorafías de Joan Miró y obras de Benjamín Palencia. En concreto, se mostrará al público durante seis meses y recorrerá las corrientes artísticas desde finales del siglo XIX hasta la década de 1970.
"Engrandecer la colección y la oferta cultura de Toledo"
De su lado, la alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, ha destacado que la obra de Alberto Sánchez "engrandece la colección permanente y la oferta cultural y museística de la ciudad". Según ha informado el Consistorio toledano en nota de prensa, Tolón ha recordado también que se ha destinado un espacio único en torno a la obra de Rafael Canogar en la Real Fundación.
"Es un orgullo que dos creadores toledanos, Alberto Sánchez y Rafael Canogar, estén considerados entre los más trascendentales creadores plásticos de la España del siglo XX".
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"Aunque Alberto Sánchez vivió años en el exilio y murió lejos de España, siempre llevó a Toledo en su corazón y lo trasladó así a su obra, es la referencia cultural y artística toledana más importante de la primera mitad del siglo XX".
Inauguración de la sala 'Alberto Sánchez'. Foto: Ayuntamiento de Toledo.
Vida de Alberto Sánchez
Alberto Sánchez nació en Toledo en 1895 y murió en Moscú en 1962. Fue creador junto a Benjamín Palencia de la Escuela de Vallecas en la década de los años 20 y se marchó a Moscú debido a la Guerra Civil, en la que participó con el ejército republicano. Durante el conflicto, se destruyó completamente su estudio de Lavapiés (Madrid) y la obra que allí tenía. Sus restos están en el cementerio Vvedénscoye.
Una de sus obras más conocidas fue la que realizó para el Pabellón de la República Española en la Feria Internacional de París (1937), titulada 'El pueblo español tiene un camino que conduce a una estrella'. Tiene 12,5 metros de altura y compartió protagonismo con 'El Guernica' de Picasso.
El original de la obra desapareció, pero en la entrada del Museo Nacional Reina Sofía hay una maqueta del autor para la versión definitiva. Es la que se localizó en los sótanos del Palacio de Montjuic, en Barcelona, en 1986 junto con otras obras procedentes del Servicio de Protección del Patrimonio Artístico. Otra reproducción se encuentra en la plaza de Barrio Nuevo de Toledo, en plena Judería.
