Las Cortes de Castilla-La Mancha podrían abandonar el histórico convento de San Gil de Toledo a medio plazo. Así lo ha planteado este lunes el presidente regional, Emiliano García-Page, que ha recalcado que, en todo caso, el Parlamento autonómico se mantendría en la capital regional.
Page, durante su intervención en la constitución del Consejo regional de Transparencia y Buen Gobierno, que estará presidido por el socialista Fernando Muñoz, ha afirmado: "Seguramente, esta es legislatura nos va a tocar reflexionar y tomar la decisión sobre si no es conveniente empezar a pensar en una nueva edificación del Parlamento autonómico en la ciudad de Toledo, que a su vez pueda dar cobijo a las dependencias y organismos independientes que están supeditados a las Cortes".
Desde la tribuna de oradores del Parlamento, dirigiéndose al presidente de la Cámara, Pablo Bellido, Page ha insistido en que "probablemente sea ya razonable que nos planteemos ese salto adelante y que lo podamos abordar a lo largo de esta legislatura".
El convento de San Gil de Toledo, sede de las Cortes de Castilla-La Mancha desde 1985 tras su rehabilitación bajo la dirección del arquitecto Fernando Chueca Goitia, es un histórico edificio del siglo XVII ubicado en pleno casco histórico toledano que fue declarado Bien de Interés Cultural en 1998.
Su titularidad es municipal, aunque el Ayuntamiento toledano cede gratuitamente el inmueble para que el Parlamento castellano-manchego lo utilice como sede y lo mantenga.
Page no ha detallado las razones por las que considera que hay que empezar a pensar en una mudanza ni ha adelantado si tiene en mente algún edificio de Toledo que considere idóneo para acoger en un futuro la sede de las Cortes.