La segunda fase del proyecto Vega Baja en Toledo ya ha comenzado y lo ha hecho con la exploración de un georradar en un terreno de 8.000 metros cuadrados situado al sur de la senda de las Moreras, unos trabajos que permitirán comprender mejor la disposición y continuidad de los edificios que hay en las parcelas anexas y completar el plano del yacimiento.
Así lo ha anunciado este lunes el concejal de Urbanismo, Florentino Delgado, que ha indicado que este terreno, declarado Bien de Interés Cultural, "fue elegido para albergar las terreras, desde 2005, y nunca se había sometido a excavaciones arqueológicas".
Delgado ha señalado que la segunda fase de Vega Baja en 2025 supondrá actuar y proteger otros 39.000 m2 del sector del yacimiento excavado entre 2005 y 2006. Se trata de dos zonas ubicadas a ambos lados de la denominada Senda de las Moreras: 32.200 m2 en el sector sur, propiedad del Ayuntamiento, y 4.200 m2 en el sector norte, propiedad de la Junta.
"Esta actuación implica una coordinación entre administraciones, entre las que se encuentra el Ministerio de Cultura, con una financiación que se estima alcanzará 1.700.000 euros, con lo que así se completará la segunda fase de esta actuación", ha añadido.
Permite detectar restos arqueológicos
El concejal ha explicado que la prospección geofísica mediante georradar es el paso previo para el diseño definitivo de este proyecto. Se trata de un estudio no invasivo del subsuelo que no requiere ningún tipo de afección al terreno y que permite detectar la presencia de restos arqueológicos existentes en el subsuelo.
En este caso se emplea un georradar tomográfico de 16 canales, modelo IDS Georadar Stream-X. Los resultados obtenidos en esta prospección geofísica permitirán comprender mejor la disposición y continuidad de los edificios que hay en las parcelas anexas, completar el plano del yacimiento y diseñar el proyecto de la Fase 2 de 2005, subvencionado por el Ministerio de Cultura.
El profesional que encabeza estos trabajos es Gianluca Catanzariti, geólogo profesional, registrado en Italia y España, que tiene una amplia colaboración con las universidades e instituciones públicas internacionales en el campo del uso de las nuevas tecnologías para investigaciones arqueológicas, geológicas, medioambientales y de ingeniería.
Ente otros proyectos internacionales, ha llevado a cabo la prospección de la tumba KV62 de Tutankhamon, la búsqueda de tumbas reales sin descubrir en el Valle de los Reyes en Luxor y la búsqueda de la tumba de Cleopatra en Taposiris Magna (Egipto), patrocinado por National Geographic y Discovery Channels.
En el caso de Toledo, con esta ha realizado las cuatro prospecciones de la Vega Baja, entre los años 2020 y 2024, además de la Villa Romana de Rielves en 2022 y el castillo de Escalona en 2018.
En estos trabajos también participa la empresa Global Arqueología, con Gema Garrido Resino y Antonio Gómez Laguna como codirectores de las seis prospecciones mediante G.R.P, realizadas en la Vega Baja, Rielves y Escalona.