El Ayuntamiento de Toledo se prepara, con ayuda de los fondos europeos, para revolucionar la movilidad de la ciudad con la implantación de un sistema integral de control del tráfico. El nuevo gran hermano de la movilidad, conocido por sus siglas como SIMUSET, incluye la instalación de 83 cámaras de lectura de matrículas, que se instalarán en 28 puntos de la ciudad, tanto en los accesos a la capital regional, así como en las vías principales.
Cada una de las cámaras, que controlará un carril de circulación, registrará la matrícula, la fecha, la hora y la dirección del del desplazamiento.
Estos nuevos dispositivos, que podrían entrar en funcionamiento antes de fin de año, no sólo permitirán obtener información de los vehículos que pasan por un punto, sino además poder conocer las intensidades y avisar en caso de detectarse una matrícula perteneciente a una lista negra como la de vehículos robados o la de automóviles cuyos propietarios se encuentran en busca y captura.
Gestión y emisión de sanciones
“Son cámaras que van a suponer también una ayuda muy importante en cuanto a la seguridad ciudadana. Es cierto que son cámaras de control del tráfico, de control de vehículos, pero también son cámaras que van a estar a disposición de Policía Local y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado", explica el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez, en una entrevista concedida a la agencia Europa Press.
Asimismo, la tecnología que incorporan permite obtener una imagen ampliada de la matrícula por lo que el Sistema de Control de Accesos a Zonas de Bajas Emisiones, que está siendo instalado por Sociedad Ibérica de Construcciones Ibéricas (SICE) tras hacerse con el contrato por 3,12 millones de euros estará preparado para la gestión y emisión de sanciones.
Por ejemplo, el software está preparado para determinar si un vehículo tiene autorización para circular por una zona de la ciudad si existieran restricciones de acceso por densidad de tráfico, obras, eventos o cualquier otra circunstancia y abrir un expediente sancionador en caso contrario.
Enviar la denuncia
En este caso, una vez determinada la infracción, el programa está diseñado para remitir la correspondiente denuncia al centro sancionador correspondiente, que la tramitará o anulará, según corresponda.
Si el centro sancionador aceptara la denuncia, devolvería de nuevo al sistema la denuncia tramitada con los correspondientes datos necesarios para la sanción. Esta sería remitida directamente a Hacienda donde procederían a la notificación y requerimiento de las sanciones correspondientes.
Por último, y con los datos recibidos por las cámaras de control de matrículas, el Ayuntamiento de Toledo también podrá generar informes diarios de intensidad de tráfico, tiempos de recorrido y matrices de origen y destino de los viajes en el que caso de que en un futuro se instalen cámaras también en las salidas o puntos intermedios de Toledo.
Zonas de las cámaras
Las cámaras de control de acceso a las Zonas de Bajas Emisiones se están instalando en la TO-21 a la altura de la avenida Adolfo Suárez y de la calle Bélgica, en la avenida de Madrid, en el paseo de Recaredo junto a la entrada de las escaleras mecánicas, en la Puerta de Bisagra, en el eje Cabestreros-Cervantes-Doce Cantos, en la intersección de la avenida de la Cava con la carretera de Piedrabuena y en la avenida de Castilla-La Mancha a la altura del aparcamiento disuasorio de Safont.
Además, en el paseo de la Rosa se instalarán varios de estos dispositivos. Los lugares elegidos son a la altura del aparcamiento de Azarquiel, en la zona de la estación de trenes, así como en las intersecciones con las avenidas de la Purísima Concepción y de Santa Bárbara.
Los ojos de este ‘Gran Hermano’ también están siendo instalados en Carlos III a la altura de su confluencia con la calle Nicaragua y acceso al aparcamiento de Santa Teresa, en las plazas de Ávila y de Grecia y en Mas del Ribero para controlar el acceso al parking disuasorio de Coronel Baeza.
Por último, en el Polígono estarán presentes en Valdemolinos, Valdepozos, Estenilla y Valdemarías con Río Marchés, en río Arlés con la TO-23, en Estenilla con Río Cabriel, en los cruces de Guadarrama con Valdermarías, en Ventalomar en su entrada al Polígono Industrial y cerca de su confluencia con Río Cabriel y en el cruce de Vía Tarpeya con la TO-23.
Un gran hermano con 138 cámaras
Por si este control fuera poco, el Ayuntamiento también ampliará la red de cámaras DOMO de videovigilancia del tráfico. Serán 15 más que se unirán a las 40 que ya funcionan, dieciséis de ellas instaladas en los controles de acceso a las zonas peatonales del Casco histórico y otras 24 destinadas a la videovigilancia del tráfico en distintos puntos de la ciudad y que facilitan información en tiempo real de la situación del tráfico a la Sala Turriano de la Policía Local.
Estos 15 nuevos ‘vigilantes’ que se suman a los 83 de lectura de matrículas estarán en la TO-20 a la altura de la calle Alemania y de la avenida de Adolfo Suárez y en la TO-21 en su confluencia con la avenida de Adolfo Suárez y con las calles Bélgica y doctor Francisco Hernández. Los restantes dispositivos recogerán imágenes del tráfico a la altura del Chuletero y en el Polígono.
En este último barrio se están ubicando en Estenilla con Fresnedoso a la altura de la entrada del nuevo hospital universitario, así como en las intersecciones de Guadiana con Guadalimar, en Estenilla con Boladiez y en Boladiez con Valdeyernos, Bullaque, Guadarrama, Cascajoso, Valdehuesa y Ventalomar.
Tres paneles de señalización oculta
El Ayuntamiento de Toledo considera que la implantación de la Zona de Bajas Emisiones (ZBE) permitirá mejorar la salud de las personas, la calidad de vida de los vecinos de todos los barrios y mejorar la experiencia de los turistas ya que se podrá conocer la densidad de tráfico en tiempo real y, dependiendo de la situación, recomendar y/o limitar al viajero qué ruta y medio escoger para evitar la saturación de las vías públicas y reducir la emisión de CO2.
Uno de los nuevos dispositivos, cuya instalación también está contemplada y que ayudarán a lograr los objetivos tanto de movilidad como los medioambientales, son los paneles de señalización oculta, que serán colocados en las tres grandes entradas al Casco histórico: Puerta de Bisagra, en el eje de Cabestreros-calle Cervantes- Cuesta de Doce Cantos y paseo de Recaredo. Su función no será otra que la indicar la prohibición de acceso, por lo que sus pictogramas sólo se visualizarán cuando sean activados.
Entre esos pictogramas se encuentran de prohibición de acceso por contaminación, con indicación de la excepción para vehículos autorizados, que lo estarán por disponer de etiquetas medioambientales del tipo que se designe, y serán activados a voluntad desde el Centro de Control en base a los niveles de contaminación registrados.
No obstante, el alcalde de Toledo ha confirmado a Europa Press que la puesta en marcha de esta Zona de Bajas Emisiones no va a suponer para los toledanos "ningún cambio" más allá de que tengan que llevar en sus automóviles las etiquetas de la DGT. "Más allá de eso, no va a haber grandes cambios en cuanto a la movilidad de la ciudad", subrayaba Velázquez, negando que vaya a haber restricciones en el centro de la ciudad si no se dispone de la etiqueta ECO, por ejemplo.
Paneles informativos
El sistema integral de movilidad urbana sostenible y eficiente de Toledo (SIMUSET) también incluye la instalación de más paneles de información de plazas libres en aparcamientos públicos de la capital regional, nuevos paneles informátivos de mensajes variables, 20 estaciones de aforo y toma de datos de tráfico y puntos de control de contaminantes atmosféricos, que se ubicarán en el Ayuntamiento de Toledo, en Ronda de Buenavista, en el paseo de la Rosa a la altura de la avenida de Santa Bárbara y en la Biblioteca Pública del barrio de Santa María de Benquerencia.
Por lo que se refiere a lo paneles informativos sobre el grado de ocupación de los aparcamientos se renovarán los siete existentes y se instalarán otros cinco. En total siete puntos distribuidos por toda la ciudad en los que se informará de las plazas libres de los parkings situados en Santo Tomé, paseo de Recaredo, Miradero, Corralillos de San Miguel, Azarquiel, Safont, Juzgados, Coronel Baeza, Salto del Caballo y Santa Teresa.