Toledo se quedará con la Ciudad del Cine, cuyos platós se levantarán en la zona de Polvorines

Toledo se quedará con la Ciudad del Cine proyectada inicialmente para Guadalajara con una inversión total cercana a los 12 millones de euros. Los estudios de grabación, salas de producción, camerinos, talleres de decorados y el resto de infraestructuras necesarias para que la industria audiovisual encuentre allí todo lo necesario para llevar a cabo grandes rodajes de series y producciones de época se levantarán en la zona del parque de Polvorines, según han confirmado en primicia a EL ESPAÑOL - EL DIGITAL CLM fuentes del sector. 

El proyecto, también conocido como Hub Film CLM, pretende crear en nuestra comunidad autónoma "la gran sede del cine español", en palabras del presidente regional, Emiliano García-Page, que el pasado mes de julio de 2023 durante la toma de posesión del actual delegado de la Junta en Guadalajara, José Luis Escudero, otorgó a la Ciudad del Cine "una importancia similar a Puy de Fou en Toledo o Toro Verde en Cuenca" y pronosticó que tendrá "una repercusión en cientos de puestos de trabajo".

El Ejecutivo regional, aconsejado por una consultora especializada, eligió inicialmente el Fuerte de San Francisco de la capital guadalajareña -unas instalaciones militares abandonadas desde hace años- para desarrollar el proyecto. La idea era que el espacio fuese explotado por un operador privado especializado a cambio de unas contraprestaciones que no han trascendido por el momento.

Fondos europeos

Los primeros detalles fueron desgranados en marzo de 2023 por el vicepresidente primero de Castilla-La Mancha, José Luis Martínez Guijarro, y el entonces alcalde de Guadalajara, el socialista Alberto Rojo. Para rehabilitar y adecuar el complejo se iban a destinar cerca de ocho millones de euros de fondos europeos, a través del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia del Gobierno de España, que ya había dado el visto bueno.

Sin embargo, el pasado mes de marzo el Pleno del Ayuntamiento de Guadalajara -ahora comandado por la 'popular' Ana Guarinos- rechazó con los votos de PP, Vox y Aike firmar el convenio propuesto por la Junta de Comunidades. La alcaldesa aseguró: "No es legal ni se ajusta a derecho y si lo firmamos estaríamos incluso cometiendo un delito. No lo vamos a hacer".

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"La Junta quiere una Ciudad del Cine exclusiva y excluyente, que supondría la privatización del Fuerte y que los vecinos no tuvieran acceso a este espacio", denunció Guarinos, cuyo equipo de Gobierno pretendía que el Gobierno autonómico financiase de forma paralela en el mismo espacio una nueva biblioteca y las escuelas municipales, tal y como estaba comprometido desde que en 2010 la Administración regional ingresase, gracias al desarrollo urbanístico de la zona, unas cuantiosas plusvalías que deberán ser compensadas con 22 millones de inversión.

Polvorines como 'plan b'

Pese a que desde el Ayuntamiento de Guadalajara han propuesto el Poblado de Villaflores como alternativa para ubicar la Ciudad del Cine, el Gobierno de Castilla-La Mancha nunca ha tenido en cuenta esa opción y, nada más conocerse la negativa municipal a ceder el Fuerte de San Francisco, se movilizó para encontrar un 'plan b' dentro de la comunidad autónoma.

Según ha podido saber EL ESPAÑOL - EL DIGITAL CLM, la consultora que vio al Fuerte de San Francisco la mejor de las opciones para desarrollar el que será uno de los estudios de rodaje y producción más completos y vanguardistas de España también ha dado el visto bueno y ha resaltado la idoneidad del parque de Polvorines de Toledo, debido a que la ubicación sigue siendo céntrica y cercana a Madrid, mantiene edificaciones históricas que le darán credibilidad a los rodajes y cuenta con unas magníficas vistas al Casco Histórico.

Se espera en este caso que las buenas relaciones que mantiene el Ayuntamiento de Toledo, gobernado por Carlos Velázquez (PP), con el Ejecutivo autonómico no sean un impedimento que haga caer por segunda vez la inversión, tal y como ha ocurrido en Guadalajara, sino todo lo contrario.

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El parque toledano de Polvorines, de titularidad municipal, se encuentra en el margen izquierdo del río Tajo, frente al campus universitario de la Fábrica de Armas. Se trata de un espacio degradado cuyo nombre proviene de las edificaciones que, desde finales del siglo XIX, se levantaron para almacenar la pólvora que surtía a la factoría de la que salía buena parte del armamento del ejército español. Ahora, décadas después de su abandono, la estructura de varios de esos depósitos sigue en pie y será rehabilitada para convertirse en la futura Ciudad del Cine. 

Esta será la tercera intentona de calado que se lleve a cabo para recuperar Polvorines y su entorno, después de que el Gobierno autonómico de María Dolores de Cospedal paralizase la construcción del Centro de Investigación del Fuego en Toledo que comenzó a levantarse en 2011 y de que no haya fructificado el convenio firmado en 2018 entre el Consistorio toledano y la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) -en época de la alcaldesa Milagros Tolón y del rector Miguel Ángel Collado- para desarrollar un vanguardista Campus de Innovación.

La incógnita de la financiación

La gran incógnita que sobrevuela el proyecto hoy por hoy recae en la financiación y en los nuevos plazos de desarrollo, puesto que los casi ocho millones de euros fondos europeos comprometidos para la Ciudad del Cine estaban condicionados a que un 30 % de la ejecución se alcanzase antes del 31 de diciembre de 2024. 

En el plan director del proyecto original, el del Fuerte de San Francisco de la capital guadalajareña, proponía restaurar de forma integral el taller de forja para eventos y rodajes; mejorar el convento y la iglesia para habilitarlos como localizaciones de época; utilizar la vivienda principal como oficinas centrales, cineteca y espacio multifuncional; reconvertir la cantina en un espacio de cáterin; poner en funcionamiento estudios especializados en postproducción audiovisual, maquillaje, vestuarios, etc. en las naves; aprovechar las dimensiones de los antiguos talleres para la construcción de decorados, reparación de equipos, escuela audiovisual, almacén y estacionamiento; y transformar el cuerpo de guardia en un centro de recepción de visitantes y cafetería.

Pero también se pretendía intervenir en los espacios públicos, con la creación de una plaza central con áreas peatonales y zonas de rodaje, un vial de servicio y circulación perimetral para el tránsito de vehículos pesados y acceso de producción o accesos peatonales y rodados diferenciados para visitantes y trabajadores.

Plató Mocap

Además, con la creación de un plató Mocap para captura de movimiento y efectos visuales y la instalación de sistemas avanzados de realidad virtual y tecnología audiovisual de última generación, se quiere convertir a la Ciudad del Cine en un polo audiovisual especializado único en Europa, combinando actividades de rodaje, formación, turismo y desarrollo tecnológico.

En la actualidad, el sector no cuenta con un espacio que pueda acoger grandes rodajes de series y producciones de época cercano al principal polo de la industria audiovisual, la Comunidad de Madrid, que concentra el 70 % de la misma. Antes Guadalajara y ahora Toledo, a tan solo 70 kilómetros de distancia y cargado de historia, tiene mucho que ofrecer.