El histórico exalcalde de un pueblo de Toledo se enfrenta a 18 meses de prisión por un delito urbanístico

Basilio Damián Solórzano, el que fuera alcalde de Hormigos (Toledo) durante 24 años se enfrentará a una pena de 18 meses de prisión y ocho años de inhabilitación especial para cargo público en el juicio que tendrá lugar el próximo martes 17 de septiembre en la Audiencia Provincial de Toledo.

Esta es la petición que ha hecho el fiscal tanto contra el exmandatario como contra el arquitecto municipal entre 2005 y 2009 como presuntos autores de un delito contra la ordenación del territorio.

Según describe el escrito del fiscal, al que ha tenido acceso la agencia Efe, los hechos que se juzgan tuvieron lugar en septiembre de 2007, cuando una empresa inmobiliaria solicitó autorización al Ayuntamiento de Hormigos para la realización de un estudio de detalle para la ordenación de los terrenos ubicados en la prolongación de dos calles de nueva creación y cuya calificación urbanística era de suelo rústico de reserva.

Ante la solicitud, el secretario municipal informó de manera desfavorable en base a la necesidad de someterla al trámite de información pública de 20 días, informe técnico jurídico de la Comisión provincial de Urbanismo y aprobación por el Ayuntamiento.

Sin embargo, Solórzano -quien se mantuvo en la Alcaldía hasta las elecciones de 2011- dictó un decreto que aprobaba el estudio de detalle presentado por la empresa prescindiendo del procedimiento legalmente establecido.

Por su parte, el arquitecto emitió informe urbanístico favorable porque la parcela pertenecía al suelo urbano consolidado del nuevo Plan de Ordenación Municipal que, no obstante, acababa de ser aprobado de manera inicial y no estaba aún en vigor.

Una vez aprobado el estudio de detalle, la empresa solicitó licencia para la construcción en los terrenos de 10 viviendas unifamiliares adosadas, que recibió informe favorable del arquitecto en aplicación de un Plan de Ordenación Municipal no vigente y a pesar de un informe emitido por el departamento de Control del Colegio Oficial de Arquitectos de Castilla-La Mancha y el del secretario municipal.

Pese a todo, el alcalde otorgó la licencia de obra.