El repicar de las campanas se ha convertido en asunto de Estado en Aldeanueva de San Bartolomé (Toledo) hasta el punto de que sus vecinos están llamados a votar en una consulta popular para decidir si el campanario que preside el Ayuntamiento tiene que ser silenciado de madrugada.

Esta decisión ha sido tomada por el equipo de Gobierno que preside Ángel Farao (Vox) después de que un grupo de vecinos solicitase el cese del sonido del reloj durante la noche para facilitar el descanso.

Al parecer, los impulsores de la queja son personas que tienen su segunda residencia en este municipio de apenas 400 habitantes situada en la comarca de La Jara y que durante el verano multiplica su población.

[El pueblo de Toledo que está dispuesto a todo para impedir que la feria deje de celebrarse en su Plaza Mayor]

El referéndum aldeanovitano fue convocado el pasado miércoles y estará abierto hasta el viernes, 20 de septiembre. En él pueden participar todas las personas mayores de edad que estén empadronadas en la localidad con el fin de posicionarse sobre si el sonido que anuncia las horas en punto cada 60 minutos se debe interrumpir desde las 0:00 horas de la madrugada hasta las 6:00 de la mañana. 

Por el momento, entre los que se han acercado a votar gana de manera mayoritaria la opción de mantener el mecanismo en funcionamiento, ya que consideran que es una tradición que forma parte de la identidad del pueblo.

Quejas por el ruido

Aldeanueva de San Bartolomé no es el único pueblo en el que ha surgido un debate en torno al ruido este verano. En otra localidad toledana, Orgaz, el Ayuntamiento tuvo que salir al paso de unos rumores que aseguraban que los espectáculos organizados con motivo de las Ferias y Fiestas en honor el Cristo del Socorro iban a ser trasladados fuera de la Plaza Mayor.

En un comunicado, el ayuntamiento orgaceño desmintió que fuesen a tomar esta decisión de cara a las fiestas que se celebraron a finales de agosto pero reconoció que habían tenido noticias de que una plataforma vecinal estaba preparando una denuncia para 'silenciar' su plaza.

Como en Aldeanueva de San Bartolomé, los promotores de la iniciativa eran personas con segundas residencias cerca de la plaza, que no viven durante todo el año en la localidad.