Florentino Delgado (Sotillo de las Palomas 1955) lleva cerca de año y medio al frente de la Concejalía de Planeamiento Urbanístico del Ayuntamiento de Toledo. Consciente de que la capital regional es una “ciudad histórico-compleja”, este abogado con 40 años de ejercicio a sus espaldas se ha marcado como objetivo aprobar inicialmente el Plan de Ordenación Municipal de Toledo antes de que acabe la legislatura. Conocimiento y ganas no le faltan. En su dilatada trayectoria profesional ha sido letrado de la Dirección General de Urbanismo de la Junta, secretario de la Comisión Regional de Urbanismo, secretario general de la Delegación Provincial de Política Territorial en Toledo y secretario de las comisiones provinciales de Urbanismo y Vivienda.
Partidario de los consensos, Delgado espera que “todos los grupos políticos se pongan de acuerdo para dejar sentadas las bases del futuro desarrollo de Toledo”, un nuevo planeamiento en el que la ciudad “no debe conformarse con el cumplimiento de los estándares mínimos legales”. Partidario de abrir debates, se muestra a favor de que el urbanismo del siglo XXI deje su impronta en el Casco y de permitir la construcción en vertical allí donde sea posible.
Pregunta. ¿Cómo define urbanísticamente la ciudad que se encontró hace año y medio?
Respuesta. Es una ciudad histórico-compleja. Toledo tiene una serie de valores extraordinarios de los que puede presumir tanto por historia como por arte y patrimonio. Y luego es una ciudad que es apasionante desde el punto de vista urbanístico porque es complejísima y dificilísima de tratar. Tiene unas características singulares, que le son propias y que son difíciles de variar. Su composición por núcleos urbanos hace inviable, por no decir imposible, que esa fisonomía que presenta pueda ser modificada, al menos a corto plazo.
P. ¿Es complicada o la hemos hecho complicada?
R. Se ha hecho complicada y parece que se va a seguir complicando. La complicación no va a desaparecer fácilmente.
"Toledo es una ciudad que es apasionante desde el punto de vista urbanístico porque es complejísima y dificilísima de tratar"
P. En esta legislatura está al frente del urbanismo en Toledo. ¿Qué ciudad quiere dejar?
R. Hablar en primera persona es pretencioso porque las cosas se hacen siempre en equipo. Pero creo que podemos sentar las bases para que su estructura mejore, sobre todo pensando en compactar la ciudad, en darle un carácter más vivible, más próximo, más transitable.
P. ¿Falta entonces una identidad urbanística de ciudad? ¿Toledo es más una conurbación de núcleos urbanos que una ciudad propiamente dicha?
R. Barrios como Valparaíso o La Legua son meramente residenciales. Es verdad que tienen servicios comunes, pero sólo responden a los estándares mínimos de su desarrollo y no dan servicio al conjunto de la ciudad. Este tipo de barrios crecen en horizontal más que en vertical, lo que ha contribuido a alejarnos del concepto de ciudad. No se hace ciudad; no se hace ciudadanía fácilmente así.
"Tenemos que pensar en compactar Toledo, en darle un carácter más vivible, más próximo, más transitable"
P. Y luego está el Casco que no deja de perder vecinos.
R. Somos los propios toledanos los que estamos aislándolo. Tenemos registradas 8.020 viviendas en el Casco. Si las multiplicamos por una media de tres habitantes tendríamos 24.000 personas en el barrio. Sin embargo, estamos siempre rondando los 10.000.
P. ¿Por qué?
R. Porque muchas de las viviendas carecen de los avances o de la modernización que hoy en día necesitamos. Incluso la propia estructura viaria del Casco no favorece, sino que limita mucho su habitabilidad. Por ejemplo, no cabe un gran supermercado o una gran superficie. Pero es que tampoco aceptamos el pequeño y mediano comercio que ha habido toda la vida.
Entristece mucho pasear por la ciudad y ver que se ha quedado reducida en realidad a tres o cuatro calles principales. Si nos aventuramos a pasear por cualquier calle pequeña no encontramos ningún tipo de atractivo que no sea el puro placer de pasear por una calle estrecha, oscura, que nos remonte a épocas pasadas. Hoy en día conservar el patrimonio que tiene el Casco impide o limita muchísimo su desarrollo, modernización o actualización. Incluso el solape que podría haber arquitectónico es casi imposible porque no se acepta por la sociedad ni por los organismos tanto públicos como privados que defienden el patrimonio. El Casco no puede ser una ciudad moderna.
"Soy partidario de abreviar plazos en la tramitación del POM, sinceramente porque la burocracia no me gusta demasiado. Entretiene y entorpece muchísimo"
P. ¿Se peca de exceso de rigor?
R. Creo que se peca un poco de conservadurismo. Hay que ser más imaginativos, un poquito más audaces y buscar el equilibrio, la armonía y la belleza. Que a través del equilibrio podamos modernizar la ciudad o hacerla compatible con ciertos avances sin necesidad de destruir lo que tenemos. Así podríamos hacer más atractivo el Casco y hacerlo más vivible para la gente.
P. ¿El urbanismo del siglo XXI no tiene derecho a dejar su impronta en la ciudad histórica?
R. Siempre lo he defendido. Hace muchos años era un poco más de recalcitrante en lo contrario, pero la vida me ha hecho ir evolucionando. Un día asistí a una jornada en la que el arquitecto Sáenz de Oiza decía que todas las generaciones tienen derecho a dejar su impronta y el poso de su paso por la ciudad. Esto en Toledo es muy difícil, tiene muy difícil encaje. Pequeñas actuaciones, sí, pero una gran actuación, una gran obra, incluso de carácter público, es prácticamente imposible. La Catedral, el Ayuntamiento, el Palacio de Justicia, el Palacio Arzobispal, los conventos…en su día probablemente produjeron un gran impacto en la ciudad, porque su dimensión era muy grande en una ciudad de pequeñas casas residenciales.
"Hoy en día conservar el patrimonio que tiene el Casco histórico de Toledo impide o limita muchísimo su desarrollo y modernización. Este barrio no puede ser una ciudad moderna"
P. ¿Y ahora por qué no?
R. Ahora, qué gran edificio, qué gran obra pública se puede realizar en Toledo que no llame a la oposición e incluso en muchos casos, al escándalo por una defensa ultraconservadora de lo que llaman los ingleses el ‘skyline’ es decir, la panorámica. Está claro que la gente se opondría. No estoy atacando que se conserve la ciudad, faltaría más. Pero hay que evolucionar un poco y permitir que el día de mañana también presente la incorporación de esa modernidad.
P. Parece que tiene claro el diagnóstico, pero cuál es la solución
R. Vamos a ver cómo podemos abrirlo con la modificación del Plan Especial del Casco, pero buscando siempre el equilibrio, la armonía y la belleza.
P. ¿Qué le gustaría ver en el Casco?
R. Sinceramente, me gustaría ver un Guggenheim en el Casco. Y creo que cabe. Para eso están además los profesionales. Es más, ya propuse cuando visité la Escuela de Arquitectura que los alumnos, como proyecto fin de carrera, se atreviesen a diseñar edificios arquitectónicos que tuviesen encaje en la ciudad. Incluso, en los nuevos presupuestos municipales vamos a proponer que se habilite una partida que estimule e incentive esa iniciativa en los nuevos arquitectos.
P. ¿Por dónde podrían empezar?
R. Toledo tiene plazas tan pequeñas que no acogen en sí una gran escultura o una obra arquitectónica. Así que a lo mejor hay que buscar la fórmula de que encaje alguna de ellas. Por ejemplo, en la plaza de Padilla se me ocurre que podría levantarse un edificio moderno y vanguardista, que fuera atractivo y que permitiera ofrecer una panorámica de la ciudad sin que destacara su punto más alto para que no chocara con San Marcos y la iglesia de los Jesuitas. Podría convertirse en un polo de atracción turística y cultural. No sé si cabe, pero a lo mejor hay que intentarlo.
"En la plaza de Padilla se me ocurre que podría levantarse un edificio moderno y vanguardista, que fuera atractivo y que permitiera ofrecer una panorámica de la ciudad"
P. Ahora hay instrumentos para intentarlo porque se tiene que redactar un nuevo Plan de Ordenación Municipal. ¿Cómo van los plazos?
R. Creo que por tiempo será difícil aprobarlo con carácter definitivo en esta legislatura, pero sí que sería bueno que todos los grupos políticos nos pusiéramos de acuerdo en dejar sentadas ya las bases de futuro desarrollo.
P. ¿Cree al menos que la aprobación inicial del POM puede producirse en esta legislatura?
R. Creo que sí y además tenemos que dedicarnos con todo nuestro afán a lograrlo. Es verdad que vamos con un poquito de retraso, porque la tramitación de un plan como este es complejísima, porque participan muchas administraciones. Además, estamos afectados por la Declaración de Patrimonio de la Humanidad que lleva implícita una defensa a ultranza de los valores patrimoniales que presenta la ciudad. Es evidente que todo esto exige una tramitación que se prolonga en el tiempo más allá de lo deseable. Yo soy partidario de abreviar plazos, sinceramente porque la burocracia no me gusta demasiado. Entretiene y entorpece muchísimo. En este sentido, animaría a la Junta a que modificarse la ley para que las grandes capitales y medianas ciudades como Toledo, que disponen de medios propios, tengan un poquito más de flexibilidad. Hay que aliviar los trámites para que no se prolonguen tanto en el tiempo.
P. ¿Cuál deberían ser los puntos esenciales del futuro planeamiento?
R. En el nuevo Plan de Ordenación Municipal no queremos conformarnos con el cumplimiento de los estándares mínimos legales. No siempre hay que conformarse con las cesiones mínimas establecidas por la ley en cuanto a parques y jardines, en cuanto a equipos dotacionales, aprovechamientos e incluso con la vivienda.
"Las administraciones no deben exigir a un particular que baje el precio de su vivienda. Lo que deben hacer es poner viviendas sujetas a algún régimen de protección a disposición de quien lo necesite"
P. El precio de la vivienda es precisamente uno de los grandes problemas de los españoles
R. El artículo 47 de la Constitución a quien obliga a facilitar el cumplimiento del derecho a una vivienda digna y adecuada es a las administraciones, a los poderes públicos, no a los particulares. Se está hablando de bajar el alquiler, de poner un tope de los alquileres…. Lo que hay que hacer es dejar a los particulares tranquilos. Las administraciones deben cubrir esa necesidad con sus propios medios o articulando otros medios de colaboración, incluso con entidades particulares. El mismo artículo de la Carta Magna tiene un segundo inciso que dice que los poderes públicos promoverán los medios para que esa finalidad se pueda cumplir. Las administraciones no deben exigir a un particular que baje el precio de su vivienda. Lo que deben hacer es poner viviendas sujetas a algún régimen de protección a disposición de quien lo necesite.
P. Pero las administraciones han abdicado de esa responsabilidad. Incluso el Ayuntamiento de Toledo lleva casi dos décadas sin promover vivienda de forma directa.
R. Siempre he defendido que la Empresa Municipal de la Vivienda tiene que cumplir esta finalidad. Este debe ser su objeto prioritario antes que otros que se le puedan encomendar. Además, es que hay medios legales para que así sea puesto que las administraciones públicas son las beneficiarias de las cesiones de suelo. La ley establece dos formas de obtención de suelo por parte de la administración pública. Una es obligando a los promotores o a los agentes urbanizadores a que entre el 30 y el 40% de las viviendas de cada unidad de actuación tengan algún régimen de protección. Y dentro de estos tipos está uno específico que es de la propia Administración y no de los particulares. Me refiero a las viviendas de promoción pública. Yo no veo que haya muchas viviendas de promoción pública últimamente. Por tanto, hay que demandar que cumplan con esa obligación. La ley también dice que la administración, en cumplimiento del principio de participación de la colectividad en las plusvalías que se generen como consecuencia de su intervención administrativa, obtendrá el 10% del aprovechamiento lucrativo.
"Si las administraciones hubieran promovido vivienda con el aprovechamiento lucrativo en vez de comerciar con ello para obtener fondos no estaríamos hablando de tanta necesidad"
P. Y, ¿dónde está?
R. Lo que han hecho es comerciar con ello y enajenarlo para obtener fondos. Si hubieran cumplido con esa finalidad y con ese aprovechamiento lucrativo no estaríamos hablando de tanta necesidad de viviendas. Yo lo tengo muy claro y no voy a renunciar además a decirlo, incluso a denunciarlo.
P. ¿Va a haber dinero suficiente para la redacción del Plan de Ordenación Municipal?
R. Ahora sí. Es cierto que hay ciudades que disponen de más presupuesto. Por ejemplo, Granada va a destinar de 2,8 millones euros para la redacción de su plan de ordenación municipal. Nosotros partimos humildemente con una partida que no llegaba a 100.000 euros, pero lo hicimos porque teníamos ya trabajo elaborado. Lo que pasa es que los equipos redactores interesados a lo mejor no lo sabían y por eso quedó desierta la licitación.
Ahora creo que todo el mundo sabe que hay un gran trabajo realizado con antelación que no tienen que repetir y del que se pueden servir. Por eso no necesitamos tanto presupuesto, pero es evidente que lo hemos mejorado. Con IVA incluido estamos en 833.000 euros. Además, hay que tener en cuenta que, en este caso, hay un valor añadido, que es el prestigio de redactar un POM para la ciudad de Toledo.
P. ¿La Peraleda será un lugar de expansión de la ciudad?
R. En principio, presenta muchas pegas, así hay que habrá que delimitar perfectamente bien qué parte pudiera ser y qué parte no. Acabamos de padecer los efectos de la DANA de Valencia. Esto nos tiene que mantener alerta porque, aunque parezca que con el tiempo desaparecen los peligros, luego de repente se presentan un día y, por no haberlos previsto, las consecuencias son fatales e irremediables. Hay que hacer un estudio perfecto. Y en el caso de que algo sea aprovechable, habría que prever también muros de contención que evitasen esos peligros. O sea, habría que reforzar las medidas de previsión para que fuesen eficaces y evitasen unas consecuencias y unos daños previsibles.
"Las zonas inundables en Toledo ya son conocidas en gran medida. Pero ahora, con la redacción del POM, es un momento adecuado para reforzar esos análisis"
P. ¿Cree que esta catástrofe va a servir para tomarse en serio la legislación en materia de inundabilidad?
R. Las zonas inundables en Toledo ya son conocidas en gran medida. Pero ahora, con la redacción del POM, es un momento adecuado para reforzar esos análisis.
P. ¿Por dónde debe crecer la ciudad? Siempre se defiende coser la ciudad, pero luego se apuesta por extenderla.
R. Una de las formas que permiten el cosido de los distintos barrios y la compactación de las ciudades es la construcción en vertical. Allí donde sea posible hay que planteárselo. Por ejemplo, en el solar del Hospital Virgen de la Salud, si no lo impide o no le afecta el cono visual, podría levantarse una gran torre y un polo de atracción comercial, cultural, que arraigue a la gente del barrio; que no le haga irse a otro sitio, sino que se queden ahí. Algunos arquitectos ya se han atrevido a mandarme algún ‘mono’, es decir, algún dibujo.
P. ¿Es el momento de convocar un concurso internacional de ideas?
R. Pues sí. Con esto no estoy afirmando que sea lo que procede o que sea el ideal. Yo no estoy diciendo eso. Lo que sí estoy poniendo sobre la mesa es que haya debate, que se presenten ideas y que se mejoren las anteriores, porque si no nos estancamos; no arrancamos ¿No estamos hablando de modernidad y de vanguardia? Pues hagámoslo.
P. Llevamos años esperando la aprobación del estudio informativo del AVE Madrid-Extremadura. Hay varias opciones sobre la mesa y algunas plantean meter el trazado dentro de la ciudad. ¿Es partidario del viaducto sobre el Tajo? ¿Cuál es la mejor solución?
R. Solución perfecta probablemente no haya, porque todas están condicionadas por las propias características de Toledo. Además, en Toledo no partimos de cero. Toledo tiene una tradición ferroviaria y tiene una estación preciosa que presenta un valor del que no todas las ciudades pueden presumir. La estación del tren de Toledo no es cualquier cosa. Es algo que en sí mismo considerado presenta valores que siempre hay que mantener y potenciar. Así lo quiere la ciudad. Por tanto, la estación de Santa Bárbara, tiene que recibir inversiones y mejorarse. La propia infraestructura lo demanda. Pero, además, hacerlo así será más barato que si la lleváramos a otro sitio.
P. Entonces, ¿el viaducto es inevitable?
R. El segundo problema es encontrar la salida más adecuada. Cualquier alternativa puede ser conflictiva o causar impacto porque estará condicionada por el Tajo, las zonas inundables o los conos visuales, que no pueden salvarse de cualquier manera. Se requiere un análisis, un estudio y una solución que a lo mejor perfecta nunca será, pero que tiene que aproximarse.
P. ¿Cuál es para usted la solución que más se aproxima a la perfección?
R. Pues en este caso es competencia del propio Ministerio.
P. Pero usted tendrá una opinión formada.
R. Sí, pero no vincula.
P. ¿Haría el viaducto sobre el Tajo?
R. No creo que el viaducto y el túnel sean tan necesarios. Recorrer hacia atrás un kilómetro, pongo por caso, no es tan complicado y a lo mejor procura una salida que evita el conflicto y el impacto. Creo que sería una salida más fácil, pero doctores tiene la Iglesia.
"Sería una sorpresa muy difícil de aceptar que los retrasos dejen a Toledo fuera del trazado del AVE Madrid-Extremadura"
P. ¿Cree que tantos dimes, diretes y retrasos puedan dejar a Toledo fuera del trazado?
R. Sería una sorpresa muy difícil de aceptar.
P. Se lo pregunto porque en Extremadura dan por hecho que si se mantiene el plazo de 2030 se utilizará la línea convencional electrificada y ésta no pasa por Toledo.
R. Pues no lo sé. No tengo respuesta y creo que no la tiene nadie. Que sospechemos que va a ser muy difícil, pues sí, pero ya se verá. También depende mucho de los recursos. Si el Ministerio se empeña y dispone de recursos o los genera, claro que se puede. Otra cosa es que haya problemas de financiación.