La Casa del Corcho está situada en el toledano parque de la Vega.

La Casa del Corcho está situada en el toledano parque de la Vega. Javier Longobardo

Toledo PLAN DE SOSTENIBILIDAD TURÍSTICA

Toledo traslada los 50.000€ de fondos europeos destinados a la Casa de Corcho al proyecto del parque del Granadal

El asunto llega este martes a la Comisión de Hacienda. El presupuesto para la regeneración urbana del Granadal pasa de 700.000 a 750.000 euros.

Más información: El Ayuntamiento de Toledo inicia el proceso para regenerar el céntrico parque del Granadal.

Publicada

El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Toledo va a trasladar los 50.000 euros de fondos europeos que tenía asignados a la puesta en marcha de un centro de interpretación ambiental en la Casa de Corcho a incrementar, en la misma cantidad, la partida destinada al proyecto de regeneración urbana del parque del Granadal. Está última intervención contará finalmente con 750.000 euros frente a los 700.000 euros reservados inicialmente. Sin embargo, la baja de la partida para la Casa de Corcho supone el desestimiento de la actuación.

El expediente de modificación de crédito llega este martes a la Comisión de Cultura, Hacienda y Patrimonio del Ayuntamiento de Toledo con todos los informes técnicos favorables. El Ayuntamiento también cuenta con el visto bueno del Gobierno regional ya que las dos actuaciones forman parte de las intervenciones incluidas en el Plan de Sostenibilidad Turística en Destino de Toledo, que cuenta con un presupuesto total de 4,2 millones de euros. Ambas actuaciones estaban incluidas en el Eje 1 de citado plan, que recoge las actuaciones en materia de 'Transición Verde y Sostenible'.

"Una vez comprobado que las modificaciones de las actuaciones están motivadas, responden a la misma finalidad, no suponen alteración de la distribución del presupuesto por ejes, y tampoco rebajan en el porcentaje del etiquetado climático se procede a aprobar dichas modificaciones", señala el informe firmado por Ana Isabel Fernández Samper, directora general de Turismo, Comercio y Artesanía del Gobierno regional.

Un nuevo miradero al Tajo

El proyecto de la zona del Granadal incluye la rehabilitación estancial y paisajística del rodadero situado tras la ruinas del convento de San Pablo para convertirlo en un parque en el que se recupere el granado como principal elemento arbóreo, significativo de la antigua explotación de cultivos frutales de los terrenos.

El Ayuntamiento de Toledo quiere aprovechar una plataforma creada por la orografía natural del terreno en la parte media de la ladera para habilitar un miradero al Tajo y al Valle donde vecinos y turistas puedan pasar el tiempo, comer o simplemente sentarse a ver unas vistas hasta ahora desconocidas.

Como el terraplén tras las ruinas del convento tiene una pendiente muy pronunciada, el proyecto que se está redactando plantea aligerar dicha pendiente mediante un aterrazado del terreno.

Granados, olivos y membrillos

El nuevo jardín resultante deberá contar asimismo con sistema de riego para asegurar la supervivencia de la vegetación que se plante que, además de por granados, estará compuesta por membrillos, olivos o martinillos, así como con plantas aromáticas y de fácil mantenimiento como el romero, el tomillo y la lavanda.

El adecentamiento del Granadal también incluirá la creación de nuevos recorridos peatonales que permitan acceder a este nuevo espacio verde, ahora inhóspito, desde la curva de Bajada de los Desamparados, así como desde la calle Carrera y la Puerta del Vado.

El entorno de las dársenas de Safont será mejorado.

El entorno de las dársenas de Safont será mejorado. Javier Longobardo

Asimismo, el Ayuntamiento se plantea instalar bancos e incluso habilitar áreas para poder sentarse o tumbarse sobre el mismo terreno y contemplar las vistas. La zona también contará con iluminación adecuada a la intervención, así como fuentes, puntos o elementos de agua.

Muralla y ruinas del convento

La regeneración urbana del Granadal, que mejorará la conectividad urbana de esta zona neurálgica de la ciudad y su accesibilidad, no solo se centra en el terraplén. En total abarca una extensión de 6.572 metros cuadrados que incluye los restos de muralla que pudieran aparecer durante la intervención en el rodadero y las propias ruinas del convento de San Pablo, sobre las que se actuó de forma somera durante la construcción del remonte de Safont. En este sentido, también se baraja la recuperación de las ruinas para un posible uso público.

"Consideramos que, para conseguir los objetivos propuestos de recuperación paisajística de esta zona situada en el entorno de la muralla de la ciudad y que es la primera vista que se tiene del Casco histórico desde la estación de autobuses y desde el puente de Azarquiel, es necesario incrementar la partida", señala el informe en el que se pide la modificación presupuestaria, firmado por el alcalde de Toledo, Carlos Velázquez.

El citado documento explica también que los 50.000 euros reservados para la Casa de Corcho estaban destinados a dotar este edificio de energía solar térmica a través de la cubierta y un sistema de aerotermia.

"Estas actuaciones, se han considerado insuficientes para poder poner en funcionamiento un Centro de Interpretación. Por otro lado, al encontrarse el citado edificio en el entorno de bienes de interés cultural, cualquier actuación está sometida a unas estrictas condiciones, que han determinado que las actuaciones propuestas no son viables", señala el citado informe.

Sala de exposiciones

La intención del anterior equipo de Gobierno era crear en este edificio singular situado en el parque de la Vega y, ahora en desuso, un centro de interpretación ambiental dirigido a toledanos y turistas.

La intención era que la Casa de Corcho albergara una sala de exposiciones y una sala multiusos.

La intención era que la Casa de Corcho albergara una sala de exposiciones y una sala multiusos.

El proyecto incluía habilitar en la planta de abajo una sala de exposiciones permanente en la que contar a vecinos y turistas las acciones desplegadas por el Ayuntamiento de Toledo en la lucha contra el cambio climático. La Casa de Corcho también estaba llamada a convertirse también en un centro de información sobre los jardines y la vegetación existente en Toledo, así como un espacio dedicado a la educación ambiental de pequeños y mayores. Además, estaba previsto convertir la segunda en una sala multiusos para ser utilizada en reuniones, proyecciones, cursos y encuentros.

Antes de recibir los fondos europeos, el Ayuntamiento de Toledo ya había invertido recursos propios en limpiar y dejar diáfano el interior de la Casa de Corcho, que había sido utilizada anteriormente como vivienda del guardés del parque de la Vega.