Últimamente, las apariciones de Miguel Bosé en las redes sociales están dando mucho de qué hablar. El cantante no se muerde la lengua para opinar de política o de la situación de Venezuela.
Sin embargo, esta vez ha utilizado su cuenta de Instagram para descubrir las tremendas circunstancias en las que estuvo envuelta la grabación del disco 'Lo mejor de Bosé' de cuyo lanzamiento se cumplen 20 años. Meses inmovilizado y postrado en la cama con un corsé, tras sufrir un accidente de tráfico del que poco se supo.
"Este disco lo grabo tras mi accidente de coche que me tuvo en cama y con corsé ortopédico durante meses. Había mucha demanda de mercado y tuve que improvisar. Agarré dos canciones nuevas, “Hacer por hacer” y “No hay un corazón que valga la pena”, las únicas que tenía listas de un material futuro y las grabé. Y luego le pedí a un joven DJ de 19 años que conocía muy bien mi carrera y era gran admirador, que me hiciese dos versiones “dance” de “Nena” y “Bandido” e hizo dos joyas históricas. Ahí nació @carlosjeanofficial Y el éxito del álbum, aparte de ser una especie de recopilatorio fue que, una nueva generación que se acababa de enganchar a Bosé, descubriese como si fueran nuevos, “Nena” y “Bandido” para dar el salto al “dance floor”. Además, las dos nuevas canciones propuestas fueron a su vez dos singles. Es decir que esa improvisación de álbum fue un bombazo y desembocó en una gira y otro CD de inmenso impacto: GIRADOS," asegura.
El cantante, en referencia a la portada del disco, dice que "la foto fue hecha en mi casa, en la antigua Somosaguas, a la espera del alta del corsé. Lo llevaba puesto y estaba recién levantado. De ahí el desaliño".
Los detalles del siniestro, 20 años más tarde, no son muchos. Sí se sabe que tuvo lugar cuando circulaba por carretera con la mexicana Rebecca de Alba, íntima amiga suya y, también, de Ricky Martin o Luis Miguel. Alba salió ilesa de un accidente que afectó severamente a Miguel Bosé.