Es común ponerles nombre a los tríos, así se ahorra el tiempo que se tardaría en mencionar a cada uno de los integrantes. Para muestra están: los Tres Tenores, las Trillizas de Oro, el Trío La La La, el de las Azores, la MSN o la BBC.
Los personajes de esta ilustración son los tres grandes negacionistas de la pandemia y, para acortar, los hemos llamado el Trío del NO. “Todo está bajo control”; “el virus chino es como una gripe”; “el riesgo es casi nulo”; “cuando empiece el calor se acabarán los contagios”; “un día desaparecerá y será un milagro”; “la mejor opción para combatir el virus es que el 60% de la población se contagie"; “es un resfriadinho” y ” los brasileños no se pueden contagiar”, son solo algunas de las frases que salieron de las bocas de este afamado trío.
Quizás debido a ese feroz negacionismo de esta enfermedad, dos de ellos recibieron la visita del Covid-19. Sin embargo, el más osado de ellos sigue libre del virus -que sepamos- y continúa con sus desplantes y desafíos a la comunidad científica mundial. Y es aquí donde queríamos llegar.
Según la RAE, “morbo” se define como el interés o atracción malsana por personas, cosas o acontecimientos desagradables. Y es que, ante cada nueva declaración de este personaje, surge en muchos de nosotros ese impulso que puede llegar a avergonzar. Esa misma sensación que hace a una plaza entera murmurar cuando el torero se acerca a la puerta de toriles a recibir a portagayola; o por la que los espectadores se lamentan cuando un directo no llega por muy poco al mentón del otro púgil.
Cada mañana, ya sea en el gran estado de Oregón, la soleada California o, sin irnos tan lejos, en Castilla-La Mancha, muchos se acercan a la prensa con esa curiosidad “malsana” por averiguar con qué pie se habrá levantado Donald hoy.
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Este tiempo de confinamiento da para muchas cosas, hasta para hacer una ilustración en pareja. Mercedes Juan es diseñadora gráfica e ilustradora, y trabaja en una productora de eventos: Brava Producciones. Benjamín Juan es arquitecto desde el año 1987, y socio del estudio toledano Arquitectos San Lorenzo 8. Son padre e hija. Benjamín es un dibujante ocasional en asuntos que no son de su profesión. Mercedes ejerce el dibujo digital a diario. Han unido sus capacidades para hacer una ilustración que va desde el lápiz al píxel, con la esperanza de que se convierta en una costumbre periódica.
Desde hace unas semanas, otro miembro de la familia, Paula Juan, colabora en la redacción del pequeño texto que acompaña la viñeta.