Ana Obregón ha reaparecido este jueves en televisión después del año más difícil tras la muerte de su hijo, Aless Lequio.La actriz se ha puesto tras las cámaras para presentar el especial Campanadas de RTVE junto a Anne Igartiburu desde la Puerta del Sol y no ha podido evitar emocionarse al recordar a la persona más importante de su vida.
"El motivo por el que quería estar aquí era para que la gente viese que estoy enviando un mensaje de esperanza aún siendo una madre que ha perdido a un hijo.Sé que todo el mundo lo está pasando mal, algunos peor que otros. Solo depende de nosotros", ha comentado la actriz mandándole un beso al cielo.
"Lo más importante en esta vida es dedicar tiempo y amor a las personas que quieres porque, cuando te vas, es lo único que te llevas.Pero para dedicar ese amor y ese tiempo a las personas que quieres, tienes que tener a las personas que quieres contigo.Y para conseguir eso, tenemos que ser responsables", ha continuado diciendo.
No es la primera vez que Ana Obregón da la bienvenida al nuevo año en RTVE. La presentadora despidió el 1993 junto a Joaquín Prat y volvió al año siguiente con Ramón García, repitiendo también en las Campanadas del 2004.
En esta ocasión, Ana ha elegido un vestido blanco realizado en crepépesante de seda natural y ajustado a la cinturade Alejandro de Miguel. Se trata de un diseño con escote barco, manga larga con volumen y hombros descubiertos. Además,tiene un drapeado y una abertura lateral. La propia actriz ha dicho que ha elegido este color "porque representa el luto en algunas culturas y ella aún tiene presente la pérdida de su hijo Aless", fallecido el 13 demayo.
Hace unos días, el diseñador toledano aseguraba a EL DIGITAL CLM que había sido "fascinante" ver la evolución del vestido y el resultado final. Sin desvelar el gran secreto sí afirmaba que Ana Obregón luciría "elegante, sin brillos ni transparencias, pero espectacular."