Un ídolo generacional. Así ha sido considerado Fran Perea (Málaga, 1978) desde su debut en 'Los Serrano' hace 13 años, una serie que dejó huella en todo un país y que, según afirma, marcó un antes y un después en su carrera profesional. A pesar de su gran éxito en la pantalla, el malagueño quiso poner punto final a esta etapa para centrarse en la música y en el teatro, una valiente decisión que le ha permitido disfrutar más de su trabajo. Y, aunque algunos de sus proyectos no han tenido la repercusión deseada, es consciente de que fracasar también forma parte del camino.
Fue portada de la Súper Pop e incluso algunas personas llevan su nombre y su canción tatuada, algo de lo que se siente muy orgulloso. Al igual que de haber participado en una serie de tanto alcance con compañeros a los que llama "familia". Cuando le preguntas qué ha hecho durante todos estos años, dice que es imposible resumirlo. Simplemente, ha estado aprendiendo de la vida y de la profesión. Ahora, coincidiendo con su momento más feliz, el cantante se ha lanzado a la carretera con Canciones para salvarme, una gira que pasará por Toledo el próximo 28 de agosto.
La mayoría de gente que escucha su nombre piensa en el Fran Perea de 'Los Serrano' y no en el cantante. ¿No le cansa que le hayan encasillado en ese papel?
Durante una época sí que me llegó a molestar un poco, sobre todo cuando me fui de la serie, porque estaba muy saturado. Con el paso de los años lo fui asimilando y me di cuenta de que hay cosas que uno no puede controlar, así que lo he asumido con gusto y pensando que es una suerte haber participado en un proyecto que ha tenido tanta repercusión, que ha marcado generacionalmente a un país y cuyas canciones conoce la mayoría de la gente. Tengo que asumir que ha sido un hito muy importante en mi vida y así lo disfruto.
¿Es consciente de que ha sido el amor platónico de millones de adolescentes?
Sí que lo soy. Además me hace gracia porque yo también fui adolescente y tengo una hermana que también lo fue. Yo forraba las carpetas con músicos y ella con el actor de moda en esa época, y me hace mucha gracia saber que eso también ocurrió conmigo. El otro día, una cuenta de Instagram publicó una portada de la revista Súper Pop y yo salía ahí. Eso es divertido. Yo fui portada de la Súper Pop y eso no lo puede decir cualquiera.
Seguro que usted también tiene un amor platónico, ¿quién es?
Yo he vivido varios, pero el más fuerte ha sido Natalie Portman. Ella empezó muy joven, cuando yo era adolescente y quería ser actor, y siempre deseaba poder conocerla y poder trabajar con ella.
¿Cuál es la mayor locura que le ha pedido un fan?
Ya me han pedido varias veces, y algunas hasta lo han hecho, tatuarse mi nombre o algo escrito por mí. Hace poco me pidieron que escribiese en un papel ‘Uno más uno son 7’ y a los pocos días me llegó la foto del tatuaje.
Después de tantos años, ¿no ha aborrecido la canción de ‘Uno más uno son 7’?
Es verdad que siempre me la piden en las conciertos, pero yo ahora disfruto mucho de tocarla. De hecho, le he preparado hasta un ritual porque es la joyita de la corona y hay que cuidarla. Con esta canción se produce una cosa muy curiosa en todos los conciertos, pero hay que venir para verlo.
¿Por qué dejó 'Los Serrano' cuando la serie estaba en pleno auge?
Yo dejé la serie por muchos motivos pero, básicamente, porque la brecha de edad entre mi personaje y yo cada vez era mayor. Él no cumplía años y yo sí, algo que me costaba entender. Yo llevaba tres años en la serie, tenía 27 y pensaba que ya había acabado ese ciclo. Me apetecía hacer otras cosas y creía que era el momento de arriesgar y no de quedarme en mi zona de confort.
Fue una decisión valiente y arriesgada, y más aún con el tirón que estaba teniendo en aquel momento…
Por supuesto. Fue un riesgo enorme y me costó muchísimo tomar la decisión, pero me alegro de haberlo hecho porque he podido hacer muchas cosas. Pude volver al teatro, que lo había dejado de lado con la serie, grabar un disco por mi cuenta, poner en marcha mi sello y otras muchas cosas que he ido haciendo durante todos estos años.
Aun así, volvió para participar en el último capítulo, pero ¿cuál habría sido su final “soñado”? Muchos espectadores se llevaron un chasco.
No te imaginas la que nos han dado con el final de 'Los Serrano'. Yo llevaba ya dos años desconectado, así que no sé decirte qué final hubiese preferido porque no me acuerdo ni en qué punto estaba la serie. Volví porque me parecía bonito, pero estaba muy muy desconectado.
Ahora que se han puesto tan de moda los reencuentros, ¿se han planteado hacer alguno?
Yo estaría encantado, pero es una cuestión que tiene que ver con la productora y con la cadena y de momento no nos han propuesto nada. Yo creo que todos nosotros estaríamos de acuerdo en volver a encontrarnos y le pondríamos voluntad, porque además nos llevamos muy bien y seguimos en contacto, así que no supondría ningún problema.
Es curioso que mantengan todos el contacto después de tanto tiempo.
La verdad es que sí. Tenemos un chat de la “familia”, que puse yo en marcha cuando saqué el proyecto de Canciones para salvarme, y vamos coincidiendo de vez en cuando. Con Belén y con Víctor he trabajado mucho y con los demás me llevo muy bien. Hemos vivido algo muy fuerte juntos y yo creo que eso también une mucho.
¿Qué ha sido de Fran Perea todos estos años? Mucha gente le perdió la pista.
Pues he estado con Elvis en una isla disfrutando de la vida (risas). Han pasado muchos años pero, en resumen, he hecho teatro, cine, televisión y música. También he invertido en proyectos culturales como mi propia compañía de teatro o una empresa de comunicación que se llama YMás. En definitiva, he ido aprendiendo de la vida y de la profesión gracias a la gente que me he encontrado en el camino.
¿Tiene algo que ver su yo de hace 13 años con el de ahora?
Realmente, vosotros conocisteis a un personaje más que al Fran Perea real. Aun así, de trece años para acá soy la misma persona pero con las experiencias que he ido acumulando. Me considero una persona con suerte y creo que he ido aprendiendo a disfrutar mucho del trabajo, aunque siempre he sido muy apasionado y comprometido con lo que hago y en eso coincido totalmente con mi yo de hace 13 años.
¿Ha marcado su papel en 'Los Serrano' el resto de su carrera profesional?
En parte sí, aunque yo, personalmente, hay muchas cosas que he decidido no hacer precisamente por eso. Desde luego, la oportunidad de haber estado en la serie sí que me ha permitido elegir y eso es una suerte en una carrera como la nuestra.
¿Cuando has tenido tanto éxito en un proyecto cuesta más ilusionarse con cosas nuevas?
Después de haber triunfado tanto, cualquier cosa que haces esperas que tenga la misma repercusión, pero no siempre lo consigues. Con el tiempo aprendes que este trabajo es así y que a veces también se fracasa, pero de todo se aprende. Comparto la teoría de que fracasar está bien, porque si no sería imposible disfrutar de las mieles del éxito luego.
¿Cuál ha sido la época más feliz de su vida?
La que estoy viviendo ahora mismo. Siempre soy muy del presente.
Si no hubiese sido cantante ni actor, ¿a qué le gustaría haberse dedicado?
Qué pregunta más difícil. Yo empecé biología, así que a lo mejor estaría trabajando en algún laboratorio.
El próximo 28 de agosto estará en Toledo y ha lanzado un reto para que alguien cante con usted. Igual descubrimos un nuevo talento a raíz de su concierto…
¡Ojalá! Te lo digo en serio. Ojalá sirviese un concierto mío para que de pronto alguien pueda vivir de esto algún día. Llevo haciendo el reto #DeGiraConFran desde hace meses y he vivido cosas espectaculares y preciosas con artistas locales que llevan tiempo sin poder subirse a cantar o a tocar a los escenarios.
¿Se está animando la gente?
En la primera tanda sí que se animó muchísima gente y para el reto en Toledo espero que también haya movimiento.
¿Puede adelantarnos cómo será su actuación en Toledo?
La gente va a flipar. A la mayoría le sorprenden siempre mis conciertos porque hace tiempo que no me ven en directo. Hay parte del repertorio que no conocen y otra parte con la que empatizan muchísimo, ya que son canciones que forman parte de su adolescencia. También hay algunas sorpresitas que no puedo desvelar. Solo puedo decir que estará muy presente mi parte de actor sobre el escenario.
Y hablando de música y de interpretación, ¿preferiría dar el mayor concierto de la historia o que una de sus películas fuese la número uno?
Para mí, cada concierto que doy es el mejor de la historia porque disfruto como un enano y me lo paso en grande. Pienso que dar un buen concierto depende de ti, pero que tu película sea la número uno no.