La diseñadora toledana Ana Locking presenta una colección vinculada a la actualidad en la que intenta con sus diseños mostrar lo inexplicable a través de doce imágenes inspiradas en personajes imaginarios, ante una sociedad en constante cambio frente a lo imprevisible.
Habitual de la pasarela madrileña, Locking, Premio Nacional de Moda 2020, un evento en el que no ha participado durante las tres últimas ediciones, ha presentado este jueves su nueva colección "Paranormal", utilizando el reportaje fotográfico para dar a conocer sus propuestas.
Un trabajo en que el presenta prendas demi-couture, confeccionadas con un "exhaustivo proceso artesanal", precisa la creadora en una nota, que por un lado son ricas en detalles y, por otro, contrastan con el deseo de "no acumular, de no cargar la prenda de artificio, sino todo lo contrario, huir del barroquismo fastuoso".
Piezas confeccionadas a mano y, como suele ser en su costura, con gusto por los detalles, a las que traslada, un discurso social que tiene mucho que ver con la situación mundial actual provocada por la pandemia de coronavirus.
"Nace de la intención de crear narrativas inquietantes, surrealistas y profundamente desconcertantes", explica, y también de la voluntad de pensar una realidad donde la obligada desconexión con el entorno y el tiempo tiene como reverso "la profunda necesidad de vincularse con el otro y de conexión humana".
El ejercicio ha sido desarrollar el drama y contenerlo al mismo tiempo en cada una de las prendas. "Paranormal son esos momentos que resultan familiares y extraños al mismo tiempo", apunta.
Locking, que ha sido jurado del programa "Drag race España", señala que la historia de esta colección se inspira estéticamente en la película "Encuentros en la Tercera Fase", de Steven Spielberg.
"Deriva de la ansiedad que genera enfrentarte a situaciones que irrumpen en nuestras vidas sin avisar, situaciones que te obligan a salir adelante improvisando nuevas formas de vivir", detalla, para añadir: "todos sabemos de esta experiencia sufrida de diferentes maneras a lo largo del último año y medio".
Esta paradoja recorre todos los looks y a los personajes que los visten, que ha sabido retratar en doce imágenes el fotógrafo Eugenio Recuenco.
La creadora basa su colección en la satisfacción del proceso de crear que va más allá del diseño de prendas y que tiene que ver con la puesta en escena, de jugar a inventar y del "placer de recrearse en construir personajes y un mundo aparte", una situación que relaciona con la "fantasía y la ensoñación".