Molesta y con una actitud muy diferente a la sonrisa, la amabilidad y la educación a la que nos tiene acostumbrados, Sofía Cristo ha dejado claro en los últimos días con su actitud que no le hace ni pizca de gracia que le preguntemos por la relación que su madre, Bárbara Rey, mantiene con Edmundo Arrocet.
Si el día que saltó la noticia - espués de la publicación de unas imágenes de ambos de lo más cómplices en una fiesta navideña celebrada en un hotel madrileño- la colaboradora no tuvo problema en negar el affaire, se lo tomó a broma e incluso compartió en redes sociales sus risas cuando Alba Carrillo le decía que Bigote era como su 'papuchi', ahora las cosas son muy diferentes.
Y si recientemente la veíamos enfadadísima pidiéndonos que dejásemos de grabar porque no pensaba hablar de la vida de su madre (una reacción que incluso motivó que Bárbara entrase en directo en 'Sábado Deluxe' para defender a su hija y dejar claro que no ha tenido ninguna recaída en sus viejas adicciones pese a su extraña actitud), en su reaparición pública ha vuelto a negarse a comentar la especial amistad que la vedette mantiene con Edmundo.
Ha sido en el estreno de la obra de Jorge Javier Vázquez, 'Desmontando a Séneca', en Madrid; más seria de lo habitual, Sofía ha confesado que está "feliz" porque su madre tiene "salud y está tranquila" pero se ha negado una vez más a hablar de Bigote, con el que por cierto entabló una buena amistad en 'Secret Story'.
"Todo lo que queráis saber de la vida privada de mi madre a ella. Sabéis que yo de su vida amorosa jamás hablo", ha afirmado tajante, cortando la entrevista cuando hemos insistido al respecto con un "¿alguna cosa más que no sea de Edmundo y de mi madre?", antes de irse molesta.