El Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam) ha sido condenado a pagar 128.700 euros al viudo e hijos de una mujer que falleció en enero de 2009 después de haber acudido al servicio de Urgencias del Hospital de Hellín (Albacete) con un golpe en la cabeza y haber sido dada de alta.
De esta manera, el Juzgado de la Contencioso-Administrativo nº 2 de Albacete ha estimado la reclamación de la familia de la víctima confirmando la resolución administrativa previa que el propio Sescam había emitido de manera favorable sobre este asunto.
El caso ha sido dado a conocer por la asociación 'Defensor del Paciente' a quien acudieron los familiares de M.G.S.O., la mujer de 72 años víctima de la negligencia.
Según explica la asociación, el 27 de enero de 2020, sufrió una caída en su domicilio de Hellín por la que fue trasladada al hospital de este municipio. Allí, "sin seguir las prevenciones protocolarias para un traumatismo craneoencefálico" tales como un tiempo mínimo de observación y la repetición de las pruebas de imagen, fue dada de alta.
"La fatal consecuencia de este error fue que se pasó por alto la hemorragia cerebral que padecía la paciente, quien ya de alta al día siguiente evolucionó mal, por lo que fue reingresada para hacerle, demasiado tarde, un TAC que mostró una hemorragia cerebral cuando ya no se podía evitar su muerte", explican.
Proceso judicial
De esta manera, la familia se puso en manos de Ignacio Martínez, letrado especialista en Derecho sanitario a través de 'El Defensor del Paciente' iniciando así la tramitación de una reclamación patrimonial administrativa y posterior demanda.
Así el propio Sescam emitió un informe en junio de 2022 en el que confirmaba la "defectuosa asistencia sanitaria" basándose en que "no se siguió ningún protocolo o guía clínica de atención al paciente adulto con traumatismo craneoencefálico (TCE)".
Esta falta de asistencia precoz, "derivó en una pérdida de oportunidad para la paciente como consecuencia en la demora del diagnóstico y tratamiento de la hemorragia intracraneal teniendo en cuenta que el tratamiento temprano y adecuado es clave para la supervivencia", remarcaba el informe.
En este sentido, la resolución recoge que la paciente debería haber permanecido en observación al menos 24 horas y la deberían haber repetido el TAC.
En base a este informe y mientras de manera paralela se tramitaba el pleito en los Juzgados de Albacete, el Sescam dictó una resolución que estimaba la reclamación. Estas mismas tesis han sido ahora confirmadas por la sentencia que fija la indemnización a los familiares en 128.700 euros.
Desde 'El Defensor del Paciente' aseguran que la familia ha querido hacer público este caso para que "en lo posible se prevenga que una muerte de este tipo, que era perfectamente evitable, vuelva a producirse".
De igual modo, su presidenta, Carmen Flores, hace un llamamiento a los servicios sanitarios de urgencias para "extremar el celo en el cumplimiento de los protocolos médicos para salvar vidas, de manera que el facultativo responsable no se deje llevar por su impresión subjetiva y complete todas las pruebas precisas antes del alta".