Condenan al Sescam por la amputación de una pierna a un paciente operado en un hospital de Castilla-La Mancha
- El Tribunal Superior condena a la sanidad castellano-manchega a pagar casi 285.000 euros más los intereses a un paciente de Albacete.
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El Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha ha estimado parcialmente el recurso interpuesto por un paciente a causa de los daños sufridos tras una intervención quirúrgica realizada en el Hospital Universitario de Albacete el 3 de julio de 2015 y condena al Sescam a abonarle 284.769,87 euros más los intereses legales, según un comunicado del Poder Judicial.
El conflicto surge a raíz de extirparle al paciente un tumor retroperitoneal. Tras diversos problemas con la arteria ilíaca y con el bypass arterial que se le implantó, tuvieron que amputarle la pierna por encima de la rodilla por isquemia irreversible derivada de dos trombosis sucesivas. La sentencia de primera instancia rechazó que hubiera infracción alguna de la lex artis ni ausencia del consentimiento informado.
En su apelación, el recurrente alegó, además de infracción de la lex artis, la no planificación de forma multidisciplinar la operación, además de la ausencia de un cirujano vascular durante todo el proceso y que los urólogos tratasen de reparar por sí mismos los problemas vasculares, provocando que la pierna quedara sin riego sanguíneo durante más de tres horas.
Grado de complejidad
La Sala de lo Contencioso coincide con la sentencia de primera instancia en que el planteamiento realizado por el demandante conllevaría necesaria la presencia de un cirujano vascular en casi todas las operaciones, pues venas y arterias son elementos inevitablemente afectados en múltiples tipos de intervención.
Por ello, el Alto Tribunal no considera acreditado que el facultativo tuviera que adelantarse al inicio de la operación. “La competencia exclusiva del urólogo para la resección y separación del tumor; y la experiencia sobrada del equipo en el tratamiento de problemas vasculares asociados a su disciplina, abonan dicha solución”, añade la Sala.
No obstante, el tribunal añade que los urólogos tienen capacidad para abordar los problemas arteriales siempre que no tengan un grado de complejidad tal que exijan la llamada al cirujano vascular y dejar una pierna sin irrigación más de dos horas constituye una mala praxis.
Imposible recuperación
“Parece claro que en este caso -continúa- dadas las características del miembro y el tiempo que puede estar sin irrigación, se tardó un tiempo notablemente superior al adecuado, según la lex artis, en llamar al cirujano vascular, lo cual provocó la imposibilidad de recuperar la pierna”.
Por último, sobre la solicitud de indemnización, la Sala de lo Contencioso dictamina una cantidad total de 284.769,87 euros desglosada en: 126.311,82 euros por puntos “no estéticos”; 30.206,4 euros por “puntos estéticos”; 15.215'59 euros por 199 días de baja sin hospitalización y 50 días de hospitalización; corrección por incapacidad permanente de 95.862,68 euros; otra por ingresos del perjudicado en un 10% de la indemnización por secuelas y baja laboral de 17.173,38 euros