La Guardia Civil de Ciudad Real ha detenido a una persona e investigado a otra como responsables de la elaboración y colocación de cebos envenenados en la localidad de Calzada de Calatrava. Las actuaciones se llevaron a cabo en el marco de las funciones que les son atribuidas a los agentes, sobre el Plan Regional de lucha contra el uso ilegal de venenos en el medio natural, al objeto de localizar posibles cebos envenenados y cadáveres de fauna intoxicados con este método.
El hecho tuvo lugar en un coto de caza, del término municipal de Calzada de Calatrava, de unas 300 hectáreas y vallado en todo su perímetro, cuyo principal aprovechamiento es la caza menor, siendo esta una zona de importancia y dispersión del águila imperial, el lince ibérico y buitre negro. Diversas patrullas del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de Ciudad Real participaron en el operativo, así como el Servicio Cinológico de la Guardia Civil con un perro especializado en la búsqueda de cebos envenenados.
Modus operandi
Fueron localizados un total de 13 cebos supuestamente envenenados, colocados estratégicamente junto a vivares de conejos y charcas de agua, consistentes en embutidos de chorizo rellenos de alguna sustancia nociva con un fuerte olor a producto químico. Además incluían mezclas de una pasta de color rosado y azulado e incluso algún cebo con alfileres clavados, para hacer aún más letal su ingesta por los animales predadores. Casi todos los cebos eran frescos, pero también se localizaron otros cebos más antiguos.
De igual modo, se localizaron los productos y utensilios utilizados para la elaboración de los cebos, el cadáver de un zorro y restos óseos y pelo de otros cinco zorros, que fueron exhumados de una fosa común, procediendo a su recogida y entrega en el Centro de Recuperación de Fauna Silvestre de El Chaparrillo para su estudio y examen toxicológico.
Los agentes también incautaron diversos lazos para zorros y otros de mayor grosor para especies de caza mayor y un cepo, al considerarlos artes prohibidas para la caza y métodos masivos no selectivos, así como jaulas-trampa activadas y ocultas entre la vegetación. Fueron necesarias realizar batidas durante dos días, para proceder a la retirada de todos los cebos lo antes posible del medio natural y así evitar la intoxicación de predadores y en especial de fauna protegida.
Las diligencias, junto con el detenido, han sido puestas en conocimiento del Juzgado de Instrucción número 1 de la localidad de Almagro.