Iago Negrón, el joven de 19 años que desapareció el pasado 28 de diciembre en Pozuelo de Alarcón (Madrid) y regresó sano y salvo a su casa tres días después, estuvo en Toledo, "durmiendo en el campo por las noches" y "caminando por la ciudad durante el día".
Así lo ha confesado este martes su padre, David Negrón, al programa 'En boca de todos', donde ha explicado que su hijo "llegó a Toledo en autobús y estuvo allí los tres días con la mochila".
"Ha estado durmiendo con un saco... Por el día iba a Toledo a caminar y por la noche se iba al campo, solo. La gente no le reconocía porque iba muy oculto, no se le veía la cara porque iba con un pasamontañas", ha apuntado.
"Cogió salchichón y queso de casa"
David ha indicado que Iago "cogió salchichón y queso de casa y ha comprado pan en tiendas", gastándose "15 euros en total en tres días".
Respecto al día de su aparición, ha señalado que "llegó a las 09:00 horas a casa él solo". "Oí la puerta de su habitación, fui y me lo encontré con un pasamontañas. Estaba inconsciente totalmente de la repercusión y de lo que estaba pasando. Los primeros minutos estuvo procesando lo que había pasado", ha añadido David.
Disculpas por el "daño causado"
Iago desapareció el pasado 28 de diciembre y regresó a su casa tres días después. En una publicación compartida en Instagram, el joven pidió perdón por el "dolor causado" y aseguró que había querido "vivir una aventura".
Asimismo, pidió disculpas al Cuerpo Nacional de Policía y a todos los involucrados su mi búsqueda por "haberles hecho perder el tiempo" y pidió que "nadie siga mi ejemplo" porque "he causado demasiado sufrimiento sin razón".