La Guardia Civil ha desarticulado a la banda de los crucifijos de cobre que llevaba semanas asaltando los cementerios de la provincia de Toledo. La inquietud era ya muy grande en numerosos pueblos ante la gran cantidad de robos producidos, pero finalmente este grupo criminal ha sido desarticulado gracias a la Operación Pasmulo, que ha permitido la detención de los siete integrantes de la banda.

Con esta operación, la Guardia Civil ha llevado la tranquilidad a los municipios toledanos. La actuación de la Benemérita ha permitido la detención de seis hombres, cinco de ellos como presuntos autores materiales de los robos y los otros dos como presuntos responsables de los delitos de receptación, ya que supuestamente eran los encargados de recibir los crucifijos y trocearlos para su posterior fundición, tal como informa la Comandancia de Toledo en un comunicado de prensa.

La Unidad Orgánica de Policía Judicial de Toledo, el Equipo Territorial de Policia Judicial de Talavera de la Reina y el Equipo Roca de Illescas han esclarecido con esta operación un total de 19 delitos de robo que se habían cometido en otras tantas poblaciones de la provincia de Toledo, siendo más de 2.000 personas las perjudicadas por estos hechos.

Grabados

Uno de los últimos robos de esta banda tuvo lugar el pasado lunes en Noblejas, donde los ladrones burlaron la vigilancia y pudieron llevarse un botín de 85 crucifijos de cobre, aunque fueron grabados por las cámaras. Fuentes consultadas por EL ESPAÑOL-EL DIGITAL CLM destacan que esta grabación ha sido un elemento clave para la desarticulación de la banda.

En el transcurso de la operación, esta madrugada la Guardia Civil ha recuperado 90 crucifijos robados en el cementerio de El Casar de Escalona y tras proceder al registro del punto de receptación en la provincia de Madrid, se ha intervenido una saca con trozos de cristos de un peso de 1.000 kilos, además de una imagen de un Cristo y un crucifijo plateado.

La operación también ha permitido intervenir diversa documentación relacionada con las compras y ventas del material robado, además de una trituradora con restos pequeños de crucifijos y dinero en efectivo por valor de 17.440 euros. Los seis detenidos, todos hombres, serán puestos a disposición judicial en las próximas horas.

Muchos pueblos afectados

Algunos de los cementerios asaltados fueron los de Lucillos, Cebolla, Erustes, Lagartera, Gamonal, Torrijos, Bargas, Los Yébenes o La Guardia, entre otros, a los que se habían sumado en la última semana Noblejas y Santa Cruz de la Zarza

La delegada del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, Milagros Tolón, ha agradecido y alabado el trabajo realizado por la Guardia Civil de Toledo, que ha desarticulado a este grupo criminal que se había dedicado, en las últimas semanas, al robo de crucifijos de bronce en diferentes cementerios de localidades de la provincia de Toledo. Los pueblos toledanos también han recibido el apoyo de la presidenta de la Diputación, Conchi Cedillo.

La Guardia Civil agradece a los ciudadanos su colaboración y recuerda que el teléfono de urgencias del que dispone la Guardia Civil, 062, está las 24 horas a su disposición. Igualmente se informa de la existencia de la aplicación de móvil gratuita ALERTCOPS para que ante cualquier eventualidad puedan ponerse en contacto con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

Objetivo: el cobre

La Comandancia de la Guardia Civil de Toledo mantenía una investigación abierta para intentar esclarecer esta oleada de robos que, finalmente, ha sido frenada en seco con la desarticulación de este grupo criminal.

Lo que estaba claro en esa investigación es que la elección del bronce no era algo casual. Esta aleación está compuesta por una parte de cobre, un material cuyo precio de mercado oscila entre los 10 y 12 euros por kilogramo en la actualidad cuando se trata de piezas nuevas y en torno a los 7 euros en el caso de la chatarra.

Una vez sustraído el material, el modus operandi de este tipo de organizaciones suele continuar con la fundición de los elementos sustraídos, la obtención del cobre y su venta en el mercado negro camuflado como material de desecho.