El presidente de la Diputación de Toledo, Álvaro Gutiérrez, ha inaugurado este sábado el Museo del Vino de Méntrida (Toledo), que se ubica de dos cuevas bodega del siglo XV restauradas con la colaboración de la institución provincial tras haber sido donadas al Ayuntamiento por su propietario .
Gutiérrez ha resaltado que el nuevo museo supone una oportunidad de desarrollo local y proyección de futuro por las posibilidades turísticas y culturales que ofrece, así como ha destacado que se trata de un ejemplo de recuperación y puesta en valor del patrimonio histórico.
El proyecto lo ha realizado el Ayuntamiento de Méntrida en dos de las once cuevas bodega que horadan el cerro del Castillejo que son de su propiedad y que han restaurado y adaptado como museo con el apoyo de la Diputación, que ha financiado las obras con más de 100.000 euros, informa la institución provincial.
Gutiérrez ha señalado que el Museo del Vino de Méntrida tiene mucha proyección de futuro y ha sido una forma muy adecuada de recuperar "este tesoro patrimonial" que representan las centenarias cuevas bodegas que se conservan en el pueblo.
El presidente de la Diputación ha subrayado la apuesta del alcalde “por uno de los motores de desarrollo más importantes en la provincia de Toledo que es el turismo” y ha apuntado en ese sentido el “avance importantísimo que el enoturismo, el turismo del vino ha experimentado en los últimos años” así como "el prestigio del buen nombre de los vinos de la Denominación de Origen Méntrida”.
Por su parte, el alcalde de Méntrida, Alfonso Arriero, ha agradecido al presidente provincial la colaboración de la Diputación para crear el Museo del Vino y que ha sido fundamental, ha dicho, para sacar adelante el proyecto con el que dar valor al patrimonio y la historia del pueblo e impulsar la DO Méntrida.
Ha agradecido la generosidad de la familia Bareño que ha donado al Ayuntamiento las dos cuevas bodegas en las se ha ubicado el museo y que junto a las otras nueve conforman "un conjunto único en sus características en España”.
El proyecto de convertir en museo las cuevas bodegas de Méntrida y revalorizar el conjunto de estructuras subterráneas que horadan el cerro del Castillejo de la localidad se inició con una fase de investigación histórico arqueológica en la que se procedió a su documentación, limpieza y excavación.
Y en la segunda fase se procedió a la restauración y adecuación de dos de las once cuevas que conforman el conjunto y que son propiedad del Ayuntamiento tras la donación de su propietario.
Allí se han resuelto daños produccidos por la acción de las raíces de la vegetación y la humedad a lo largo del tiempo, ya que los primeros datos encontrados las sitúan en el siglo XV y también se ha trabajado en la creación de accesos para todo el público, la iluminación y el equipamiento con elementos representativos de la viticultura y la producción de vino el vino.