El damasquinado es una de las manifestaciones artísticas más representativas de Toledo y Mariano San Félix una de sus figuras más relevantes. A sus 83 años y con 70 de carrera profesional, de sus manos han brotado auténticas obras de arte que se han alejado de las figuras tradicionales ejecutadas con martillo, cincel e hilo de oro y plata. Paisajes, animales o incluso autorretratos que le dotan de un estilo propio y le han hecho alcanzar cotas artísticas antes inimaginables.
Ahora, toda esta obra puede disfrutarse en el centro cultural San Clemente, donde en la tarde de este jueves la alcaldesa Milagros Tolón ha inaugurado la exposición 'Damasquinado en Toledo. Con técnicas sanfelinianas (Diferente)."
San Félix se inició en el arte del damasquinado a los 13 años, en 1951. Diez años después obtenía el título de maestro damasquinador. Este hombre, que ha conseguido, entre otras muchas distinciones, el primer premio del Concurso de de Diseño de Castilla-La Mancha en el año 1990, además del primer premio del concurso Obra Maestra 1995, es todo un referente del que beben las nuevas generaciones de damasquinadores toledanos.