El cálculo de la Huella Ambiental y la certificación Declaración Ambiental de Producto (DAP) son puntos clave en Granja Circular, el proyecto de Nanta para avanzar en la sostenibilidad de la ganadería. El objetivo de ambas es valorar el impacto ambiental de un producto a lo largo de todo su ciclo de vida para poder planificar acciones necesarias para reducir este impacto y mejorar la gestión ambiental. Gracias a estos análisis, es posible aportar un valor añadido a las producciones finales, carne y leche, al trasladar la DAP y la Huella Ambiental hasta el último eslabón de la cadena de producción.
Nanta cuenta con dos gamas de piensos con Declaración Ambiental de Producto, los piensos para ovino de carne, Vitacor Life, y vacuno de carne, Bovicarn Life, así como piensos con declaración de Huella Ambiental, en el caso de la gama dirigida a rumiantes de leche, diseñados todos ellos para minimizar las emisiones de metano, fósforo y nitrógeno.
Valor añadido
El estudio de la huella ambiental de un producto o servicio implica llevar a cabo un Análisis de Ciclo de Vida (ACV), también conocido como análisis de la cuna a la tumba, que abarca la evaluación de parámetros como el calentamiento global, el uso del agua, el ozono fotoquímico, la acidificación y la eutrofización del agua, entre otros.
De esta forma, los piensos DAP de Nanta, así como el cálculo de la Huella Ambiental, son una palanca que permite a los ganaderos avanzar hacia la certificación de sus producciones y ofrecen la posibilidad de crear futuras alianzas estratégicas para desarrollar alimentos más responsables con el medioambiente. Respondiendo de esta forma a los requerimientos de la industria, tanto a nivel legislativo como a nivel de consumidor, que reclama alimentos más sostenibles.
Granja Circular
Granja Circular es la propuesta de Nanta para avanzar en la sostenibilidad de la ganadería. Alineada con el Roadmap de Nutreco 2025, se trata de un modelo de sostenibilidad con el que demostrar el grado de sostenibilidad de una granja atendiendo a cuatro pilares fundamentales: económico, ambiental, social y bienestar animal. Con el Decálogo de Granja Circular como guía, conjunto de diez troncos críticos a considerar, Granja Circular califica a las granjas en tres categorías (A, B y C) en función de sus resultados de sostenibilidad.
Con un enfoque multidisciplinar, incluye varias herramientas de cálculo y evaluación y cuenta con indicadores solventes, medibles y prácticos, siendo posible la verificación de la certificación de sostenibilidad por parte de Aenor.